Antes de presentarse en el escenario de la MGM Grand Arena, Bad Bunny tuvo la oportunidad de recibir un importante premio para su carrera en el mismo auditorio: el Latin Grammy al Mejor Álbum de Música Urbana debido a los méritos de su producción “El Último Tour Del Mundo”.
Por un momento, tras el anuncio de la victoria, se pensó que el puertorriqueño no iba a aparecer, en solidaridad con ese boicot que planteó J Balvin; pero poco después, él mismo apareció en escena, corriendo, y se subió al estrado mientras lucía un peinado que dejaba caer un largo mechón de rulos sobre su rostro.
“A veces no sé si es mejor ganar o perder, porque treparse aquí me pone horrible, me pone nervioso”, fue lo primero que dijo el intérprete, quien, como se sabe, no se siente nunca cómodo ante estas situaciones. “Nunca sé qué decir. Gracias, ¿Qué más puedo decir?, a la gente que me apoya; gracias a la Academia”.
“Hago lo que hago sin esperar nada; lo hago porque lo amo”, agregó, antes de mencionar uno que otro nombre, y reconociendo que se iba a olvidar de muchos. “Gracias a los que trabajaron conmigo, a los que estuvieron conmigo”.