México ocupa el tercer lugar mundial en recepción de remesas en 2021 con 52,743 millones de dólares (mdd), solo detrás de China e India, de acuerdo con un análisis de BBVA Research.
Además, el país es parte de las 10 naciones que concentran el 51 por ciento del total de ese flujo.
Pese a ser un importante receptor de remesas, la dependencia de estos ingresos no es tan alta respecto a otros países de América Latina debido al tamaño de su economía.
Para 2021 se prevé que las remesas a México alcanzarán el 4.1 por ciento de su Producto Interno Bruto (PIB), mientras que para el caso de Honduras, la cifra esperada es de 26.6 por ciento, según el análisis del grupo financiero basado en cifras del Banco Mundial.
El grupo financiero recuerda que en la región hay muchos países cuyas economías son altamente dependientes de estos flujos, como Honduras y El Salvador, cuyos ingresos por remesas representan más de 26 por ciento de sus economías en 2021.
Para Jamaica, las remesas equivalen a 23.6 por ciento de su PIB y en Guatemala, Nicaragua y Haití, representan más de 15 por ciento.
Agrega que el aumento de las remesas a México este año se explica por un común denominador de muchos países América Latina: el mayor flujo de personas a Estados Unidos, país que ha tenido una de las recuperaciones económicas más rápidas entre los países desarrollados receptores de migrantes.