Por segundo año consecutivo, la pandemia de covid-19 frustró las celebraciones de Año Nuevo en todo el mundo, gobiernos de muchos países han recortado los tiempos y aforos de las festividades en un esfuerzo por contener una ola desenfrenada de contagios.
En Europa, donde casi un millón de personas han muerto de coronavirus en los últimos 12 meses, los conciertos tradicionales y los espectáculos de fuegos artificiales se cancelaron en la mayoría de las ciudades, incluidas Londres, París, Zúrich, Bruselas, Varsovia y Roma.
En el mismo sentido, ayer las autoridades de India ordenaron evitar reuniones masivas, toques de queda nocturnos en todas las principales ciudades y reducir el servicio en restaurantes.
Sin embargo, a pesar de los casos en aumento, algunos lugares siguen avanzando con sus planes de eventos, incluida Sídney, la primera ciudad importante en marcar el comienzo del Año Nuevo, que exhibe espectaculares fuegos artificiales sobre la Ópera y el Puente Harbour.