El juzgado primero del Distrito de Yucatán otorgó la suspensión provisional de la construcción del tramo cinco del Tren Maya (con trazo de Playa del Carmen a Tulum, Quintana Roo), por no contar con una autorización en materia de impacto ambiental.
La construcción de la megaobra, impulsada por el presidente Andrés Manuel López Obrador, fue suspendida debido a que el juez dio la razón a un grupo de buzos que presentaron una demanda de amparo.
Es la primera vez que las autoridades se pronuncian en contra del proyecto, el cual ha generado muchas críticas por deforestación de las selvas en distintos tramos donde se mantienen los trabajos de construcción.
En días pasados, activistas de Greenpeace México dieron a conocer que la caverna Angry Wasp, así como diversos ríos subterráneos se encuentran en el camino de la construcción del Tramo cinco del Tren Maya, lo cual puede no ser una buena idea ya que es una zona frágil.
El 28 de marzo, después de que un grupo de artistas emitiera un video explicando que la nueva ruta del proyecto destruirá el sistema de ríos subterráneos más grande del mundo, el presidente López Obrador aceptó que el tramo con trazo de Playa del Carmen a Tulum, Quintana Roo presentaba complicaciones legales, pero no “por interés genuino”.
“Palenque a Mérida está sin ningún problema legal, y en el tramo de Mérida a Cancún tampoco, porque es todo el derecho de vía de la autopista, o la mayor parte. Ya se está trabajando y ya se tiene el derecho de vía casi en todo el tramo de Cancún a Tulum; ahí está dividido en dos partes, ese es el tramo que están impugnando”, dijo.
Ante estos hechos, el lunes se emitió una resolución en Yucatán concediendo la suspensión provisional del tramo cinco del Tren Maya, donde no se permitirán ejecuciones relacionadas con su construcción, infraestructura, remoción o destrucción de la biodiversidad en el terreno.