Martín Alberto Mendoza / MO

Una familia de la Ciudad de México que se encuentra aquí de visita participando en un torneo deportivo, fue localizada sana y salva, tras ser víctima de extorsionadores telefónicos.

Pese a que el asunto se ha manejado con extremado sigilo por parte de las autoridades, trascendió que la familia afectada está integrada por cinco personas, entre éstas, dos menores de edad.

Todos ellos abandonaron la hostería donde se encuentran alojados, sobre la avenida Miguel Alemán al norte, alrededor de las 4:00 de la mañana.

Pese al silencio de las autoridades, se presume que a esa hora recibieron una llamada telefónica a través de la cual estafadores comenzaron a sembrarles terror psicológico.

De esta forma y ante el temor de las amenazas que utilizan los delincuentes, abandonaron el hotel por lo que personas que forman parte del mismo grupo de visitantes dieron aviso a las autoridades.

Fue así como intervinieron elementos locales de la Agencia Ministerial de Investigación Criminal (AMIC).

Tambien tomó injerencia el grupo especial de policías federales de la Coordinación Nacional Antisecuestros (Conase).

Los tres adultos y dos menores comenzaron a ser rastreados en distintos lugares de la ciudad, ante la sospecha de que habrían sido obligados abandonar la hostería dónde están alojados para refugiarse en otro hotel.

Ante la trascendencia del hecho por tratarse de turistas, agentes investigadores se dieron a la tarea de revisar otras hospederías y plazas comerciales.

Sin revelarse muchos detalles, al inicio de la tarde, fuentes allegadas a la Fiscalía General de Justicia del Estado (FGJE) revelaron de manera extraoficial que la familia ya había sido hallada sana y salva.

Solo se dijo que estaba siendo víctima de extorsionadores telefónicos que, en las últimas semanas han intensificado sus delictivas acciones contra familias cajemenses.

Lo que parece ser una pandemia delictuosa se ha incrementado notablemente contra habitantes de la región, tanto del área urbana como rural.

Esto viene a enrarecer aún más el ambiente de inseguridad que se percibe en el entorno local, debido a los constantes sucesos de alto impacto como son crímenes y privaciones ilegales de la libertad, que continuamente están aconteciendo.

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