Una vez más no se logró superar la media anual de escurrimientos de agua en el Sistema de Presas del Río Yaqui, generando un panorama desalentador para los agricultores y ganaderos del sur, pues se podrían presentar graves afectaciones en sus respectivas actividades, afectando gravemente toda la cadena de valor.
Según los datos del Distrito de Riego, este mes tiene una media histórica de 71.2 millones de metros cúbicos, y solo se obtuvieron 21 millones, donde prácticamente no se tuvo ninguna presencia de lluvias.
Con estas aportaciones, el Sistema de Presas, mantiene un almacenamiento de mil 491.5 millones de metros cúbicos, sin embargo, a la misma fecha del año pasado la cifra era mayor con 2 mil 393.6 millones.
Detalló que la presa del Novillo es la que registra la mayor cantidad de agua en estos momentos con 809 millones, le sigue el Oviáchic con 567 millones y Angostura solo 115
Con estas bajas captaciones se tendrán graves restricciones en la siembra de la temporada 2022-2023, donde prácticamente el maíz y el trigo serán los más afectados, ya que son los cultivos que más consumen agua.
Así mismo los ganaderos se verán afectados, pues los agostaderos aún no se recuperan, por lo que tendrán que invertir más en alimento y agua, por lo que sus costos de producción se verán incrementados.
ESPERANZA
El próximo mes de junio arrancará el programa de inducción de lluvias para mitigar la sequía, el cual se enfocará principalmente en las cuencas hidrológicas de las presas de los ríos Yaqui y Mayo.
Serán más de 17 vuelos para los operativos del ciclo Primavera-Verano, ya que el año pasado fueron 15 los recorridos que se hicieron, por lo que el programa de inducción de lluvias se encuentra en la etapa de diseño técnico, el cual se da a partir de determinar la situación de las presas del Yaqui y Mayo.
Se esperan buenos resultado de los operativos en esta nueva etapa, ya que las lluvias del ciclo Primavera-Verano tienen mejor comportamiento, porque en Otoño-Invierno las concentración de los vientos y nubes es diferente.