La agricultura de conservación puede aumentar los rendimientos de trigo en el Valle del Mayo y Yaqui, por lo que resulta indispensable seguir promoviendo la adopción de este sistema de producción, señaló el Centro Internacional de Mejoramiento de Maíz y Trigo (Cimmyt).
El organismo, dijo que la prevalencia del monocultivo y prácticas agronómicas inadecuadas a través del tiempo han dado como resultado impactos negativos en la productividad de los suelos y la calidad del ambiente. Adicionalmente, la falta recurrente de agua para riego ha propiciado una reducción de la superficie de siembra.
Ante esto, se dice que las problemáticas se pueden contrarrestar mediante la incorporación de tecnologías sostenibles, como la agricultura de conservación.
Menciona que en Navojoa la agricultura de conservación se implementó con camas permanentes, cobertura del suelo usando el rastrojo del cultivo anterior y con la rotación trigo-cártamo. Al compararla con el sistema convencional de labranza al incorporar el rastrojo y monocultivo de trigo, donde se observó que la agricultura de conservación permitió un incremento promedio del rendimiento de trigo de 0.8 toneladas por hectárea.