ANKARA. La Organización Mundial de la Salud (OMS) ha alertado de que el número de víctimas del terremoto que este lunes azotó Turquía y Siria podría ascender a más de 20,000.
Esto a pesar de que el balance actual de fallecidos se sitúa sobre los 6,700, sin embargo, señalan que la gran cantidad de heridos, sumada al hecho de que se van agotando las cruciales primeras horas en las que en este tipo de catástrofes se suele recuperar al mayor número de supervivientes, hace esperar que la cifra de muertos ascienda notablemente.
Ha sido Catherine Smallwood, jefa de Emergencias de la OMS para Europa, quien ha hablado de este incremento, señalando que el número de fallecidos podría hasta multiplicarse por ocho. Smallwood hizo esta estimación cuando el balance de muertos se situaba en algo más de dos mil.
Por su parte, la portavoz de la Oficina de Ayuda Humanitaria de la ONU, Jens Laerke, ha apuntado este martes a que solo hay una ventana de siete días para rescatar a las personas que han quedado sepultadas bajo los escombros. Esta estimación es resultado de innumerables operaciones de rescate en el mundo, aunque siempre puede haber excepciones y que las víctimas soporten un poco más de tiempo.
Para rescatar a las víctimas, la ONU ha movilizado sendos equipos de evaluación de desastres, así como de búsqueda y rescate, compuestos por los mejores especialistas del mundo en estas tareas, los que están viajando a Turquía. Además, el mismo lunes llegaron a este país doce equipos enviados por distintos países y se espera que otros 27 lleguen entre este miércoles.
“El gran reto ahora mismo es el acceso por tierra (de este personal y sus equipos) ya que muchas carreteras de la región han quedado destruidas por los terremotos”, comentó Laerke. Otra dificultad es la falta de vehículos para transportar a los expertos internacionales, ante lo cual las autoridades locales están movilizando camiones desde otras provincias de Turquía.