Dayan Lagarda

EL TIEMPO

De cara a la próxima temporada que ya está por iniciar, algunos horticultores del Valle del Yaqui se han negado a sembrar pepino, cultivo de relevancia en la región, una decisión que ha sorprendido al sector, la cual puede ser por diferentes motivos.

La Asociación de Productores del Yaqui y Mayo (Aphym) ya había registrado una disminución de siembra durante 2022, por las lluvias y exceso de humedad, que no permitieron que el horticultor cumpliera en tiempo y forma con esta siembra, pasando de 428.72 hectáreas a solo 293.14.

Hasta el momento se desconoce porque los productores han decidido no sembrar, aunque algunos manifiestan que podría ser porque ya no resulta rentable, otros por los permisos e incluso por la escasez de agua, no hay nada concreto.

Es de resaltar que la producción de esta hortaliza sirve para la generación de empleos para miles de jornaleros en el Valle del Yaqui, la cual podría tener un déficit por esta situación, afectando también a la economía de las zonas rurales del municipio de Cajeme.

Hasta ahorita existe incertidumbre de lo que pasará con el pepino en el Valle del Yaqui, si se mantendrán las casi 300 hectáreas sembradas del año pasado o incluso se tendrá una menor área para este 2023.

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