Deniss Cabrera / MO
Aun cuando la ONU establece que 200 litros de agua al día por persona son suficientes para todas las necesidades, en Cajeme el consumo promedio diario es de entre los 300 a 350 litros, lo que refleja el uso ineficiente de este recurso natural.
Además, se estima que cerca del 50 por ciento del líquido que se destina para el consumo humano se desperdicia, en gran medida por fugas y derrames en las tuberías.
Jaime Garatuza Payan, vicerrector e investigador de Instituto Tecnológico de Sonora (Sonora), explicó que del total de disponibilidad anual de agua de la cuenca del Río Yaqui, aproximadamente entre un tres a cinco por ciento es destinada para el uso doméstico, el cual es prioridad, mientras que el resto es destinado a la ganadería.
“El uso en la ciudad es muy poco eficiente y habría que hacer mucha labor para tener un uso más eficiente del mismo, y eso trabajo no es solo de las autoridades, también en las casas, cada quien puede hacer su labor, cuidar que no haya fugas, las mediciones es importante porque ahí se pueden detectar las fugas en los hogares”.
Sonora es un estado árido, por lo que el agua es escasa debido a las condiciones del clima, son embargo, en los últimos años esto se ha agravado con una sequía severa, que podría afectar en mayor medida a la agricultura.
Cabe mencionar que hay industrias que han optado por implementar acciones para optimizar el uso y aprovechamiento del agua, como lo es Constellation Brands, que aplica medidas para reutilizar el recurso hídrico y el tratamiento correcto de las aguas residuales.
“Seamos conscientes de la importancia de este recurso, es vital para la vida y tratemos de cuidarla, no solo en los hogares, también en la industria y agricultura, tratar de ser más eficientes en su uso” agregó.