Dayan Lagarda / MO
Los apicultores se encuentran trabajando para salvar a las abejas durante esta época de invierno, sobre todo en estos días donde el frío se ha endurecido, poniendo en riesgo la vida de estos importantes insectos para la producción agroalimentaria.
Víctor Islas Castro, presidente de la Asociación de Apicultores del Sur de Sonora, comentó que, todos los años desde principios de diciembre, mueven a las abejas de lugar para evitar su mortandad, pues su alimento natural que es la floración, empieza a escasear.
Expresó que buscan colocarlas en lugares donde hay agua, los mismos apicultores las alimentan con algo que llaman torta proteica, la cual está hecha a base de miel y vitaminas, que les sirve durante su hibernación en esta temporada.
Islas Castro mencionó que, si llega a caer lluvia los insectos salen a conseguir un poco de alimento, pero por lo regular duran resguardadas hasta la primavera, es posible que, hasta el mes de marzo, donde empiezan a florecer árboles como el mezquite y palo verde.
Agregó que, en ocasiones las han liberado en el mes de febrero, pero a como está el cambio climático en estos tiempos es imposible saber con precisión cuándo es viable dejar a las abejas libres, pues el frío aún las puede dañar.