Dayan Lagarda / MO
La falta de agua en el Valle del Yaqui es sinónimo de incertidumbre, pues a pesar de que el presente ciclo saldrá adelante muy ajustado, el 24/25 podría no existir si no se dan las condiciones para lluvias como ocurrió durante el año pasado.
Ramón Romero, presidente de Grupo Cajeme, comentó que ya han pasado tres meses del actual ciclo agrícola y los escurrimientos son nulos en las cuencas del Río Yaqui, por lo que su esperanza para producir el siguiente año son las lluvias en verano y están 100% dependiendo de eso.
Dijo que, se tienen algunos proyectos para este año, para ver hacia dónde se moverá la agricultura, pero definitivamente necesitan tener otra temporada la cual al momento se encuentra en veremos por las condiciones secas que existen.
Cabe resaltar que, al cierre de 2023, los almacenamientos en las presas registraron un escurrimiento de 35 millones de metros cúbicos, cuando se tenía que tener una media de 215.6 millones, catalogado como uno de las captaciones más bajas en los últimos años.
Por último, Romero mencionó que no todo está en manos de la naturaleza, pues si se porta bien, podrán tener otro ciclo más, tal vez ajustado, pero seguirán produciendo, pero si las condiciones permanecen como hasta ahora, es difícil asegurar la generación de alimentos.