Fabiola Navarro /MO
“Es una denuncia pública, por el robo que hacen y la falta de respeto hacia los dolientes porque al final de cuentas uno quiere ir al otro día o quiere ir después y se encuentra ya vandalizada la tumba. Mi intención es que estos robos no se den de manera consuetudinaria”, externó Arturo Leal Ramírez.
Esto ante el robo y vandalismo que sucedió en la tumba de su señora madre, quien falleció el pasado 12 de enero y a menos de 24 horas de haberla sepultado, le fueron robadas las flores de su tumba.
La última morada de Guadalupe Ramírez Noriega, se encuentra por la calle Las Rosas, frente al tinaco en el panteón del Carmen, donde ladrones arrancaron una por una cada flor de los arreglos con los que le dieron el último adiós.
En este lugar, no es la primera vez que deudos denuncian robos de flores, desde 2016 se han presentado casos.
¿Quiénes la roban? ¿Qué destino tienen las flores? Estas preguntas quedan en el aire y mientras tanto, ni los difuntos se salvan de los robos.