Desde 1994, los dedos pulgares de todas las personas que ejercen su derecho al voto quedan marcados con una tinta indeleble, la cual tiene como objetivo evitar que la gente vuelva a votar y afecte el proceso electoral.
La fórmula de dicho pigmentador usado por el Instituto Nacional Electoral (INE) fue creada por el ingeniero bioquímico Filiberto Vázquez Dávila, quien asegura que su tinta es imposible de retirar usando cloro, alcohol, vinagre o algún solvente, incluso ha explicado que la única forma de quitarla el mismo día es arrancándose la piel.
Es importante tomar en cuenta que el líquido recibe el nombre de tinta, pero en realidad no tiene el mismo efecto que la pintura en la piel, el pigmentador del INE tiene una reacción química con la capa superior de la piel (epidermis) de las personas.
Según el Instituto Nacional Electoral, la tinta indeleble generalmente dura alrededor de 12 horas en el dedo, aunque algunos individuos pueden conservarla por más tiempo, dependiendo de factores como la regeneración celular de la piel. Filiberto Vázquez Dávila, investigador del IPN, explicó que la única forma de eliminarla es esperar a que la piel se descame o, en casos extremos, “arrancarse la piel”.
Esto significa que la tinta del INE realmente no pinta los dedos, si no que la sustancia reacciona con las células de la piel para cambiar su apariencia y sólo se va quitando cuando la yema del pulgar cambia de forma natural las células muertas por las células nuevas, este proceso puede tardar varios días en algunas ocasiones.
La producción de este líquido comenzó en febrero de 2024 y para la jornada electoral del 2 de junio se utilizaron 6 mil litros de tinta, los cuales se reparten en aplicadores a cada casilla junto con las boletas, urnas y demás material.