El superintendente estatal republicano Ryan Walters, máxima autoridad del estado de Oklahoma (Estados Unidos) en materia educativa, ha ordenado este jueves a las escuelas públicas incorporar la Biblia a las clases de alumnos de entre 10 y 18 años, una medida que llega poco después de que el estado de Luisiana obligase a exhibir los ‘Diez Mandamientos’ en todas las aulas, desde el colegio hasta la universidad, a partir del próximo año.
«La Biblia es un documento histórico necesario para enseñar a nuestros hijos sobre este país. Cada maestro, cada aula en el estado tendrá una Biblia en el aula, y se enseñará de la Biblia», ha expresado Walters, según la cadena de televisión estadounidense CBS News.
En ese sentido, ha aseverado que la medida es «obligatoria» y que todos los centros educativos deben cumplir con ella de forma «inmediata» y «estricta», y se enmarca en una ofensiva de las autoridades estatales contra libros sobre raza, orientación sexual o identidad de género.