Dayan Lagarda / MO
A pesar de ser un cultivo con baja dependencia de agua y ser fomentado por los investigadores de Inifap, el garbanzo sigue sin convencer a los productores para ampliar el área establecida, siendo todo lo contrario disminuyendo las hectáreas por problemas de mercado.
Isidoro Padilla, investigador de Inifap, señaló que, lamentablemente los detalles de comercialización del cultivo han ido mermando su siembra, pues de 8 mil hectáreas dedicadas a la leguminosa, apenas son 3 mil 500 hectáreas las que se dispersaron a la fecha, cayendo un más de un 50%.
Expresó que como todo cultivo los precios no fueron los mejores, pues el tipo de cambio es algo externo que no se puede controlar y afecta en costos de producción al agricultor, dejándole pocas ganancias.
Además, comentó que, en cuanto a la expectativa que hay en temas de reconversión es muy difícil sustituir al trigo, ya que la tierra del sur de Sonora se adapta mejor al cereal y todos los métodos de producción están enfocados a dicho grano.
Mencionó que hasta ahorita se está viendo el plan a seguir, sin saber cómo estará el panorama para el ciclo 24/25, pero el garbanzo está incluido como opción de siembra ante los problemas de sequía que están presentes en los Valles del Yaqui y Mayo.