Fabiola Navarro / MO

Estudiantes de Cajeme, se han visto afectados no solo por el exceso de velocidad con el que circulan automovilistas frente a los planteles; también, por los hechos violentos que ocurren en las inmediaciones de las escuelas.

A pesar de los esfuerzos de los tres niveles de gobierno, en las estrategias por combatir al crimen organizado y las estadísticas que muestran una baja en la inseguridad, se presentan hechos violentos a metros de los planteles escolares.

Tal es el caso del atentado contra   dos hombres, que fueron asesinados (uno de ellos apenas adolescente de 16 años de edad) en un domicilio sobre la calle Hermanos Talamante entre California y Ramón Guzmán, de la colonia Sochiloa, vialidad donde con frecuencia se registran hechos violentos y que se encuentra a dos calles de la citada secundaria.

“Se escucharon las ráfagas hasta acá y nos tuvieron en la escuela un rato, hasta que llegaron por mí”. “Sí me asusté mucho, yo estaba con mis amigas, escuchamos muy fuerte todo y nos dio miedo”, narraron estudiantes, que fueron resguardados en el plantel, la tarde del pasado 11 de febrero, tras las dos ejecuciones. Esta no es la única ocasión, en abril de 2011, se registró el primer hecho violento en las inmediaciones de la Escuela Secundaria Técnica2, cuando una balacera provocó que padres y madres de familia, acudieran por sus hijos preocupados por su seguridad.  Desde entonces, han ocurrido eventualmente situaciones que ponen en riesgo la integridad de la comunidad escolar, que queda en medio de la inseguridad.

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