Por Lorenza Sigala

Con emoción, orgullo y una clara visión de futuro, fue presentada la segunda generación del programa de movilidad internacional Sonora-Taiwán, un componente estratégico del Plan Sonora de Energías Sostenibles, impulsado por el Gobierno del Estado para consolidar el talento humano como eje central del desarrollo económico y tecnológico de la entidad.

Durante el evento, el gobernador Alfonso Durazo Montaño encabezó la entrega de computadoras portátiles a los estudiantes seleccionados, una herramienta que acompañará su estancia académica y personal durante su formación en Taiwán. Más allá del recurso tecnológico, el mandatario destacó que este apoyo representa un símbolo de confianza, compromiso y visión de Estado.

“La educación es el gran igualador de oportunidades. Por eso hemos hecho del programa de becas el más ambicioso en la historia del estado”, expresó Durazo, recordando que cuando asumió el cargo, el fondo de becas era inexistente, y hoy alcanza una inversión acumulada de más de 2,666 millones de pesos, beneficiando a más de 465 mil estudiantes.

El Gobernador compartió que esta nueva generación representa una apuesta decidida por el talento sonorense, y que la educación, particularmente en el ámbito tecnológico, es un pilar fundamental del Plan Sonora, que contempla la transición energética del estado a través del desarrollo de energías limpias, el aprovechamiento de minerales críticos como el litio y la atracción de inversión internacional, en especial en el sector de semiconductores.

“Embajadores del futuro”

Los jóvenes seleccionados estudiarán en algunas de las universidades más prestigiosas de Taiwán, país reconocido como líder mundial en tecnología de semiconductores. En representación del ecosistema taiwanés, Allen Blue, director general de Foxconn México , promotor del programa, dirigió un emotivo mensaje en el que compartió tres recomendaciones clave para su experiencia:

                1.            Crear lazos de amistad con estudiantes locales, ya que la cultura y el conocimiento compartido son tesoros imposibles de encontrar en libros.

                2.            Estudiar el modelo industrial de Taiwán, particularmente las cinco empresas líderes del país, para entender cómo la colaboración público-privada ha impulsado su desarrollo tecnológico.

                3.            Recorrer el país, conocer su gente, su historia y su geografía, y regresar con una visión global que transforme a Sonora.

“Solo una combinación cultural híbrida puede formar individuos capaces de cambiar el mundo. Ustedes tienen esa oportunidad”, señaló Blue.

Voces que inspiran

Morelia Montoya Alfaro, estudiante del Instituto Tecnológico, habló en nombre de sus compañeros con un mensaje conmovedor que reflejó el compromiso de esta nueva generación:

“Esta beca no es solo una oportunidad, es un sueño. Somos un equipo multidisciplinario, unidos por una misma meta: regresar y transformar a Sonora con el conocimiento que adquiramos. Vamos a demostrar que en el desierto también florecen ideas capaces de cambiar el mundo”.

También fueron reconocidos estudiantes de distintas regiones del estado como Jonathan Alexis, Alma Rubín Castro, Iván Andrés López Romero y Allison Guadalupe López López, quienes forman parte de esta segunda generación seleccionada rigurosamente por méritos académicos y personales.

Formación para un nuevo Sonora

Durazo concluyó recordando que uno de los mayores retos del Plan Sonora es formar perfiles profesionales que puedan integrarse a la cadena de valor de la industria energética y de semiconductores, sectores que marcarán el futuro económico del país.

“Cada uno de ustedes fue elegido no por su origen, sino por su mérito. Van como estudiantes, pero regresan como embajadores de Sonora. Su misión será también atraer inversiones y construir puentes con las empresas taiwanesas. Estamos sembrando una generación que reescribirá su destino, y con ello, el de nuestro estado.”

Con este programa, Sonora se consolida como una entidad que apuesta por la inteligencia, la inclusión y el futuro. Una tierra que transforma la luz del sol en energía, y el talento de su gente en progreso.

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