Lorenza Sigala / MO
La mañana de este martes, un incendio en el estacionamiento de la Casa de la Cultura puso en riesgo a quienes se encontraban en el lugar. Sin embargo, la rápida intervención de un bombero que acababa de salir de turno evitó que el siniestro pasara a mayores.
El incidente ocurrió alrededor de las 8:30 horas, cuando una camioneta Nissan, Rogue, color negro, con placas de Sonora, comenzó a incendiarse mientras estaba estacionada en el inmueble ubicado en la calle Cultura y Agustín de Vildosola.
Aunque en el sitio ya se habían utilizado al menos diez extintores, ninguno surtió efecto debido a que las descargas se aplicaban únicamente sobre la carrocería, mientras que las llamas se propagaban desde el motor hacia el interior del vehículo.
Fue en ese momento cuando Martín Pacheco, bombero de la estación centro, pasaba por el lugar tras concluir su jornada laboral. A pesar de no portar su equipo de protección, no dudó en tomar un extintor cargado y aplicarlo correctamente, exponiendo su integridad ante las explosiones que comenzaron a escucharse desde la unidad en llamas.
“Su conocimiento y determinación marcaron la diferencia”, comentaron testigos, quienes reconocieron que sin la intervención del bombero el incendio pudo haberse extendido y provocado mayores daños.
Minutos después arribó la unidad extintora número uno de la estación centro de Bomberos de Hermosillo, cuyos elementos levantaron el cofre del vehículo y terminaron de sofocar los puntos activos con agua hasta dejar la zona en condiciones seguras.
El hecho quedó solo en un susto, pero con un claro ejemplo de vocación: un bombero que, aún fuera de servicio y sin más protección que su experiencia, decidió actuar para proteger a la comunidad.