Óscar Félix / MO
Lo que alguna vez fue un vibrante espacio de expresión artística y encuentro cultural, conocido como el “callejón Bunka”, hoy se ha convertido en un reflejo del abandono.
Ubicado entre las calles Galeana y No Reelección, el emblemático callejón ha perdido todo rastro de su pasado esplendor, dejando solo el recuerdo de su breve existencia.
El proyecto, inaugurado durante la administración de Sergio Mariscal Alvarado y Margarita Velez, buscaba revitalizar un espacio que solía ser punto de reunión.
Sin embargo, durante un recorrido por el lugar revela un panorama desolador: las coloridas pinturas que adornaban las paredes han desaparecido, borradas por el paso del tiempo y la falta de mantenimiento
El deterioro no se limita a las obras de arte. Las fugas de agua han provocado graves daños en el piso, y la maleza crece sin control, invadiendo lo que antes fue un camino de acceso.
Para agravar la situación, el callejón ha sido víctima de vandalismo y se encuentra completamente lleno de basura, lo que evidencia el total olvido en el que ha caído.