Por Lorenza Sigala
Hermosillo, Sonora, septiembre de 2025.- Sonora se ubica como la tercera entidad con mayor incidencia de fiebre manchada a nivel nacional, de acuerdo con el informe epidemiológico semanal 2025 correspondiente a la semana 37, que comprende del 7 al 13 de septiembre.

La entidad solo está por debajo de Baja California y Chihuahua en el número de contagios confirmados.

El reporte indica que a nivel nacional, hasta la semana epidemiológica 36, se acumulaban 312 casos de rickettsiosis, con una incidencia de 0.2 por cada 100 mil habitantes. De ese total, 66 se notificaron durante la última semana, lo que representó una incidencia de 2.1 casos por cada 100 mil habitantes.

En el caso particular de Sonora, a la semana 34 de 2025 se registraban 64 casos confirmados de fiebre manchada, de los cuales 14 resultaron en defunciones, lo que refleja una letalidad del 20%. A nivel nacional, en el mismo corte, se contabilizaron 276 casos y 62 defunciones, con una letalidad del 23%.

Durante la semana epidemiológica número 37, en Sonora se estudiaron 50 casos sospechosos, de los cuales 11 fueron confirmados y 4 terminaron en defunciones. En lo que va del año, la entidad ha analizado 691 casos sospechosos, confirmando 77 y reportando 32 muertes, lo que refleja una elevada tasa de letalidad del 42%.

En comparación con 2024, los números muestran contrastes. Mientras en ese año, a la misma semana epidemiológica, se habían estudiado 580 casos con 121 confirmados y 41 defunciones, en 2025 se registra un incremento del 19% en la notificación, una reducción del 36% en casos confirmados y una disminución del 22% en defunciones. Sin embargo, la letalidad presenta un repunte del 8%.

De acuerdo con la distribución de fallecimientos en Sonora, las defunciones han alcanzado a 12 hombres y 20 mujeres en distintas regiones del estado: seis en Hermosillo, cinco en Benito Juárez, tres en Navojoa, dos en San Miguel de Horcasitas, además de un caso en Nacozari, Agua Prieta, Puerto Peñasco, Huatabampo y Pitiquito, respectivamente. En varios de los decesos no se detectaron morbilidades asociadas que complicaran el cuadro clínico.

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