Tributo a una gran madre; y una marcha con los mismos de siempre
Araceli Martínez
La semana que terminó fue muy dura y triste para la familia de MediosObson. Falleció doña Sonia Ávalos Vieyra, quien fuera madre de nuestro gran amigo y fundador de MediosObson, Jorge Armenta, pero también de Carlos Armenta, cabeza de MediosObson; la exregidora Graciela Armenta; y de Manuel Armenta, el menor de los hijos.
Por allá en la década de los 80, conocimos a doña Sonia desde la ventanilla del departamento de Ingresos del municipio donde trabajó por casi tres décadas hasta jubilarse.
Fue una mujer extremadamente trabajadora, a quien conocí de cuerpo entero a través de las pláticas de Jorgito. Doña Sonia amaba a sus hijos por igual, y hubiera dado la vida por cualquier de ellos, pero con Jorgito desarrolló una conexión especial muy fuerte. Tal vez porque era el hijo que más se le parecía física y mentalmente; y era el mayor.
Por eso cuando Jorgito murió el 16 de mayo de 2020, para ella fue un golpe demoledor que la desgarró, y que nunca superó.
Con los años, hubo momentos en que la miré de mejor estado de ánimo, pero quienes la conocíamos, sabíamos que en el fondo, el dolor de la pérdida la seguía carcomiendo.
Esa profunda tristeza la mermó y agravó sus problemas de salud; de tal manera que se nos fue el miércoles 12 de noviembre en el seno de su hogar.
La verdad no ví venir su partida, siempre pensé que doña Sonia saldría adelante; me confíe en su fortaleza pero subestime sus malestares físicos y emocionales.
Deja el recuerdo de haber sido una gran mujer, trabajadora, valiente y de carácter; una mujer que al lado de su compañero Carlos Armenta forjó grandes hijos.
En paz descanse doña Sonia, su sufrimiento ha terminado, ya se encuentra al lado de su Jorgito. Su espíritu vivirá siempre a través de sus hijos, nietos y descendientes, y en todos aquellos, a quienes nos marcó.
Un abrazo hasta el cielo para doña Sonia, orgullosa hija adoptiva de Cajeme.
Sabemos que se fue sin ver la justicia para Jorgito, pero la lucha continúa, no se apaga.
MARCHA PRO VIOLENCIA
Se suponía que la marcha contra la violencia del sábado 15 de noviembre era por la paz, pero las imágenes difundidas dieron cuenta que los organizadores del PRIan lo que querían era que la sangre se derramara para tener excusas en su lucha por retomar el poder y que Estados Unidos tenga pretextos para invadir México.
Desde luego que miramos a gente que legítimamente salió a las calles preocupada por la inseguridad, pero también a los mismos PRIanistas de siempre, desesperados, al punto de un ataque de nervios por que nada les sale, y quieren tumbar a la presidenta a como dé lugar; miramos a golpeadores profesionales contratados ex profeso para crear violencia y sembrar el caos; a gente frustrada con sus vidas que gritaban groserías como respiraban, misóginos disfrazados de amantes de la paz, y reporteros de Azteca, quienes al mando del evasor de impuestos y usurero, Ricardo Salinas Pliego a toda costa querían pintar como represor al gobierno de Claudia Sheinbaum. Y a medida que el gobierno apriete a Salinas para que pague lo que debe, se pondrá más loco y lanzará su artillería más pesada contra el gobierno de la 4-T.
SIN PENA NI GLORIA
La marcha contra la inseguridad del 15 de noviembre en Cajeme pasó sin pena ni gloria ante la poca asistencia. El evento fue abanderado por la aspirante a alcaldesa, Alba Luz Borbón; y se calcula que acudieron al llamado unas 250 personas. Por supuesto a la caminata “no partidista” se sumaron elementos Prianistas locales. ¡Faltaba más!
LARGAMENTE POSPUESTO
El cierre del MerCajeme por dos días, tras el fatal incendio de la tienda Waldos en Hermosillo, es un tema largamente pospuesto. Desde hace décadas sabemos que el MerCajeme es una trampa mortal, sin salidas de emergencia en el centro, y una serie de anomalías que gobiernos de la ideología que gusten y manden, no le han querido entrar.
Fue también bueno ver que por fin le pararon el alto a la propietaria de la Boutique Alice quien por años y felices días había mantenido invadida la banqueta con sus productos sin que nadie le dijera nada; pero no es la única, vendedores ambulantes y establecidas se han pasado por el Arco del Triunfo las regulaciones existentes acaparando las aceras con su vendimia, sin importar los riesgos que ocasionan.
Ojalá que el cierre temporal del MerCajeme y la remoción de puestos de ventas en las banquetas no sea flor de un día sino el inicio de acciones permanentes para proteger las vidas cajemenses. Hay que reconocer el trabajo de Protección Civil, aunque con un atraso de 40 años. La seguridad del centro es responsabilidad de las autoridades, pero también de los comerciantes.
NUEVA LÍDER DE LAS MUJERES
Martita Parada tomó posesión como líder del organismo nacional de mujeres priístas en Cajeme (ONPRI), una mujer a la que el PRI no le ha dado la oportunidad que se merece. Qué lástima porque la gente a la que deberían apoyar, no lo hacen.
Se hicieron presentes por supuesto, los expresidentes del PRI, Chemalito Parada, el orgulloso papá de Martita; el doctor Alejandro Villegas y Chayito Oroz; así como gente de la sociedad civil como Alberto Vizcarra y el exlider cetemista Antonio Valdez Villanueva.
El personaje del evento y el más saludado fue el exalcalde Ricardo Bours. Una fotografía saludando a la dirigente estatal, Lupita Soto recorrió las redes, lo que motivó a que muchos se preguntaran si ya regresó al PRI o está pensando en retornar. Recordemos que ya hace varios años renunció al tricolor, cuando este partido todavía tenía presencia, sería una locura regresar cuando está en la lona.
Hay quienes aseguran que en realidad, Ricardo se presentó al evento porque le hacía falta el apapacho político. La nostalgia política lo invade.
Fue notoria la ausencia de las tradicionales líderes de colonia, quienes ante la falta de reconocimiento, hace mucho que emigraron a otros partidos, quizá algunas como Ramoncita Flores andan un poco delicadas de salud; otras prefieren mantenerse al margen. Fueron décadas de entrega y se cansaron de que el pastel se lo repartieran unos cuantos y de las imposiciones.
La gran ausente fue la actual dirigente del PRI municipal, Mary Levya; y tampoco faltó su padre, Juan Leyva Mendívil, expresidente del PRI municipal. Aunque se mencionó que Mary no estuvo presente por razones de salud de uno de sus vástagos, muchos se quedaron con la duda de si la ausencia no tendría que ver con la división que reina en el tricolor a partir de su llegada. Pero con tan poquitos que son, es hora de que resuelvan sus diferencias.
Qué tiempos aquellos en los que en esas reuniones se juntaban cientos de mujeres, lo que obligaba a hacer los eventos al aire libre; hoy casi casi salen a la calle a invitar a las mujeres que van pasando.
Ante este panorama, Martita sí que tiene un gran reto.