Óscar Félix / MO
En el corazón de Esperanza, Sonora, se encuentra el Templo de la Purísima Concepción, un símbolo de la fe y la historia local.
Su construcción, que se remonta entre 1906 y la actualidad, fue llevada a cabo por los frailes franciscanos en el gran asentamiento de trazo derecho que dio origen a la Villa de Esperanza.
Este templo no solo es un lugar de culto, sino también un testigo de las tradiciones y la identidad de sus habitantes, que encuentran en él un espacio de unión y espiritualidad.
A lo largo de los años, el Templo de la Purísima Concepción ha sido escenario de numerosas festividades y eventos comunitarios, que refuerzan los lazos entre los vecinos.
Su arquitectura, que combina elementos coloniales y locales, atrae tanto a fieles como a visitantes, convirtiéndolo en un patrimonio cultural que los esperanzeños se enorgullecen de preservar y celebrar.


