Martín alberto Mendoza Salazar/MO

PRIMERO FUE EL CASO DE FRANCISCO ‘PACO’ AHORA EX MINISTERIAL DETENIDO Y PROCESADO POR SU PROBABLE IMPLICACIÓN EN EL CRIMEN DEL COMANDANTE MORALES MARTÍNEZ; AHORA UNA MINISTERIO PÚBLICO DE SAN LUIS RÍO COLORADO COMPARECIÓ EL PASADO FIN DE SEMANA COMO IMPUTADA; ELLA MISMA LO VENTILÓ EN GRUPO DE WHATSAPP; SIN EMBARGO, FISCALÍA NO HA INFORMADO NADA; A SU JUICIO LA REPRESENTANTE SOCIAL AFIRMÓ QUE NO SE SIENTE RESPONSABLE DE NINGÚN DELITO; SOSTIENE QUE LE AVERGÜENZA EL QUE HAYA ACUDIDO A UNA AUDIENCIA INICIAL COMO ACUSADA DESPUÉS DE TANTOS DE SERVIRLE A LA FISCALÍA ESTATAL; SE SIENTE DECEPCIONADA POR MANCHAR SU IMAGEN COMO SERVIDORA PÚBLICA; EL SILENCIO INSTITUCIONAL PESA MÁS QUE LA TRANSPARENCIA; LAS DUDAS QUEDARON SIN RESPUESTA Y LA FISCALÍA PREFIRIÓ OCULTARLO TODO; DE NUEVO LA HISTORIA SE REPITE: UNA AUTORIDAD QUE SE REPLIEGA, UN DISCURSO OFICIAL QUE NUNCA LLEGA Y MANEJO RESERVADO QUE ALIMENTA MÁS SOSPECHAS QUE CERTEZAS; EL SILENCIO NO ES NEUTRAL, TIENE PESO Y DIRECCIÓN. Y CUANDO SE ACUMULA, SE CONVIERTE EN LA PRUEBA MÁS CONTUNDENTE DE QUE ALGO NO MARCHA BIEN; NO SOLO EL CASO DE ARMIDA ROMERO ARMENTA LLEVA ACUMULADOS 132 DÍAS EN ESPERA DE JUSTICIA; TAMBIÉN EL ASUNTO DE JORGE MIGUEL ARMENTA ÁVALOS FORMA PARTE DE OTRO ASUNTO QUE DUERME EL SUEÑO DE LOS JUSTOS; LA JUSTICIA DEBERÍA LLEGAR CON LA MISMA INMEDIATEZ CON LA QUE LLEGAN LOS DELITOS QUE GOLPEAN A ESTA SOCIEDAD; LAS PALABRAS SE DESGASTAN, LAS PROMESAS SE AGOTAN, Y SILENCIO SE CONVIERTE EN INSULTO QUE ARDE; ESCALAN EJECUCIONES EN CAJEME; HALLAN A OTRA VÍCTIMA EN FOSA CLANDESTINA

COMO ES costumbre, en la Fiscalía General de Justicia del Estado (FGJE) donde no solo no se atienden los reclamos de justicia de familiares de las víctimas en una insolente actitud, tampoco se informa lo relativo a los procesos penales que judicializa sobre elementos de la Policía Ministerial como fue el caso del ahora ex AMIC Francisco ‘El Paco’, quien aparece como presunto implicado en el asesinato del ahora extinto comandante Manuel Morales Martínez ocurrido el anochecer del 15 de febrero de 2024. El silencio también habla. Han pasado veinte meses del asunto en cuestión y aunque el proceso sacudió a más de uno en Ciudad Obregón y dejó en evidencia lo que muchos ya intuían: en ciertos temas, el silencio institucional pesa más que la transparencia. Las dudas quedaron sin respuesta y la fiscalía prefirió guardar silencio, como si el paso del tiempo pudiera borrar lo evidente. Ahora surge el caso de Guadalupe, agente del Ministerio Público procesada en San Luis Río Colorado. De nuevo la historia se repite: una autoridad que se repliega, un discurso oficial que nunca llega y un manejo reservado que alimenta más sospechas que certezas. La falta de información termina siendo el mensaje más claro. En medio de todo, la ciudadanía vuelve a ser espectadora de un sistema que se protege a sí mismo. El silencio no es neutral, tiene peso y dirección. Y cuando se acumula, se convierte en la prueba más contundente de que algo no marcha bien. Fue la misma Ministerio Público quien ventiló en un grupo de Whatsapp que iba a comparecer en una audiencia inicial como imputada por un delito del que a título personal no se sentía responsable. Dejó en claro que era para ella una vergüenza acudir como imputada después de tantos años que le ha servido a la FGJE, señalando que en ese acto quedaba su imagen como servidora pública. Exteriorizó su temor por la suerte que puede enfrentar sin el apoyo de sus superiores refiriéndose sin decirlo se entiende que se trata del Fiscal del Estado, Gustavo Salas Chávez y los vicefiscales Ramón Tadeo Gradías Enríquez y Jesús Francisco Moreno Cruz, quienes por voces internas de la FGJE se conocen que nunca se han mostrado solidarios con el personal de la institución donde continúa prevaleciendo el vacío de liderazgo del titular como en su momento lo dijo un ahora ex diputado local. Habrá que esperar el motivo por el cual la representante social se encuentra en ese contexto… ANTES DE dejar el tema del cuestionado actuar de los mandos superiores les comentó que no solo el caso de Armida Guadalupe Romero Armenta, quien cumplió 131 días que murió al ser arrollada por un vehículo, pick up, por la Ejército Nacional frente a colonia Rincón del Valle forma parte de los casos de injusticia, sino también el de nuestro fallecido jefe, amigo y fundador de Grupo Medios Obson, Jorge Miguel Armenta Ávalos que este miércoles cumplirá 1976 días en espera de justicia. Resulta insultante que la única salida que vislumbren las víctimas sea tener que buscar una audiencia ante un juez de control o pensar en promover un amparo para que la Fiscalía cumpla lo que debería hacer de oficio: atender, investigar, dar respuestas. Eso no debería ser necesario. La justicia no tendría por qué pedirse con escritos formales o con juicios legales adicionales. La justicia debería llegar con la misma inmediatez con la que llegan los delitos que golpean a esta sociedad. Las palabras se desgastan, las promesas se agotan, y el silencio de Salas Chávez se convierte en un insulto que arde. Porque no hay excusa, no hay pretexto que pueda explicar por qué se ignora a las víctimas. No hay justificación que tape el hecho de que, mientras las familias lloran a sus muertos, el Fiscal prefiere refugiarse en su mutismo. Y aquí volvemos al inicio: cuando los zapatos de la justicia quedan grandes, aunque te empines y trates de aparentar, la realidad termina por delatarte. Los zapatos de la justicia no son para adornar ni para exhibir en discursos, son para caminar con firmeza, para pisar fuerte contra la impunidad, para acompañar a las víctimas. Si alguien no tiene la talla, la silla lo exhibe, el puesto lo desnuda, y la historia lo recuerda como un funcionario sin altura. Si la Fiscalía quiere recuperar un mínimo de confianza, debe empezar por lo elemental: escuchar a la gente, atender a las víctimas, responder a los ofendidos. Sin eso, todo lo demás seguirá siendo un cascarón vacío. Porque no hay modernización que valga, ni mesas de coordinación que sirvan, ni conferencias que tapen la verdad: la justicia en Sonora está detenida, atrapada en un rezago que sangra cada día. Y si alguien se pregunta qué significa cumplir con justicia, la respuesta es sencilla: significa atender, investigar, resolver. Nada más, nada menos. Mientras eso no ocurra, cada semana será una repetición del mismo calvario. Y cada silencio será otro golpe en el rostro de la sociedad…EN OTRA VERTIENTE, ayer en pleno inicio de la tarde en un sector altamente confluido fue asesinado un hombre en Urbi Villa del Rey. El crimen ocurrió a escasas cuadras de donde se localiza la Delegación de la Policía Municipal, cuyos agentes solo se abocaron a tomar nota, pero jamás a tratar de averiguar informes relativos a los presuntos criminales que acabaron con la vida del transeúnte cuando caminaba por la banqueta de un negocio de materiales para la construcción. Llegaron elementos de la Agencia Ministerial de Investigación Criminal y tampoco mostraron el más mínimo interés de hacer las pesquisas de campo para tratar de identificar a los presuntos homicidas. Como siempre llegó personal de Marina y del Ejército y lejos de desplegarse en el vasto sector prefirieron quedarse amontonados de manera estéril, sin evidenciar la menor intención de indagar absolutamente nada, de ahí surge la respuesta el por qué llevan semanas y meses que no capturan a un generador de violencia. La falta de voluntad es clara provocando un desconcierto de la población que va a tener que seguir soportando los mortales embates bajo el argumento de que ha disminuido notablemente la violencia…DOS HORAS antes del mortal episodio, por latitudes de la colonia Severo Girón, en la Comisaría de Providencia, el colectivo Guerreras Buscadoras de Cajeme con su líder al frente, Silvia Velázquez Rodelo hicieron el hallazgo de un cadáver sepultado en un predio agrícola al sur del asentamiento en mención. Se trata de una persona del sexo masculino de aspecto joven cuya identidad aseguran conocerla, pero de momento se la reservan por respeto a los ahora deudos dolientes. Esperarán a que se les practiquen estudios genéticos en el Laboratorio Inteligente Científico Forense (CIF) y una vez que se corrobore su identidad ésta será revelada. El cuerpo que tenía cerca de un mes de fallecido a decir de Velázquez Rodelo, se localizó en una fosa de 1.20 metros de profundidad en un terreno lodoso y lleno de agua, derivado de las recientes lluvias. Por supuesto y, de acuerdo a las circunstancias en que se encontró sin duda alguna que se trata de otro crimen más y con ello ya suman nueve en el mes de octubre. Esta vez no acudió personal de la Comisión de Búsqueda de Personas Desaparecidas que dirige Dante Noel Talavera Nieblas, quien debe trabajar más cercanamente a los colectivos para apoyarlos en la logística que significa cada exploración, porque en incontables ocasiones batallan hasta para conseguir combustible para movilizarse…POR ÚLTIMO, el amparo, otra vez en la mira. Hoy se habla de modernización, pero muchos juristas lo llaman retroceso. La nueva reforma a la Ley de Amparo endurece los filtros, limita las suspensiones y deja al ciudadano con menos defensa. Se dice que es para agilizar procesos, pero detrás del discurso técnico se esconde un cambio profundo: el poder del Estado vuelve a pesar más que el derecho del individuo. Los abogados que litigan en la calle lo saben. El amparo, ese recurso que servía para detener abusos y ganar tiempo ante la injusticia, hoy corre el riesgo de ser trámite. Se cambia la palabra ‘protección’ por ‘procedimiento’ y se celebra como si fuera avance. Pero no hay que decirlo muy fuerte. Que digan que lo dijo un mudo… el tiempo, como siempre, tendrá la última palabra…Luego seguimos, Dios mediante.

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *