Clara Aragón
EL TIEMPO
A partir del 1 de noviembre, se espera un repunte en el consumo dentro del sector restaurantero en la región, lo que representaría un respiro para los negocios que se vieron afectados durante el verano, señaló Edna Alina Tavares, presidenta de la Cámara Nacional de la Industria de Restaurantes y Alimentos Condimentados (Canirac).
Indicó que desde mediados de octubre comenzó a notarse una recuperación económica, y para noviembre se pronostica un incremento en las ventas de entre el 18 y el 20 por ciento. En general, la temporada otoño–invierno suele ser favorable para el sector, gracias a las celebraciones, la llegada de visitantes de otras ciudades y el descenso en las temperaturas.
Tavares explicó que el verano representa un desafío para los restaurantes, debido al impacto de las altas tarifas eléctricas, el aumento en el costo del agua y las elevadas temperaturas, factores que afectan tanto la operación diaria como los gastos fijos, complicando la rentabilidad y el servicio al cliente.
“Vamos a empezar noviembre con muy buena recepción de comensales”, subrayó, empezando por el día de muertos, así como por las próximas promociones del Buen Fin.


