En agosto, el consumo privado en México registró un avance mensual de 0.64%, pero mantiene un ritmo débil frente a la tendencia observada a inicios de año, de acuerdo con datos del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi).
De acuerdo con el Indicador Mensual de Consumo Privado en el Mercado Interior (IMCPMI), el dato del octavo mes del año representa un rebote respecto a la caída de 0.18% en julio.
Los datos del Inegi muestran que el incremento se debe, principalmente, por el mayor gasto en bienes y servicios de origen nacional, que creció 0.78% mensual, impulsado por un aumento de 1.29% en el consumo de bienes y 0.18% en servicios, el mejor desempeño conjunto desde abril.
En contraste, el consumo de bienes importados mostró un incremento de apenas 0.28%, su menor avance en cuatro meses.
De acuerdo con analistas, el consumo enfrenta varios obstáculos estructurales que están relacionados con el deterioro del mercado laboral, la desaceleración en el flujo de remesas, la aceleración de la inflación, que reduce el poder adquisitivo.
De acuerdo con Gabriela Siller, directora de análisis económico de Banco Base, estos factores podrían limitar la recuperación del consumo en los próximos meses, especialmente si se mantienen las presiones inflacionarias y la incertidumbre económica global.
En el acumulado de los primeros ocho meses de 2025, el consumo privado apenas registra un crecimiento de 0.01% anual, su nivel más bajo para un periodo similar desde 2020, cuando la pandemia provocó una caída histórica de 11.30%.
Gabriela Siller comentó que a pesar del repunte mensual, el balance general apunta a un deterioro en la demanda interna, lo que revela debilidad en la economía mexicana.


