GILBERTO RUIZRAZO
SUCEDIÓ.- Sí, sucedió lo que se comenzó a sospechar desde la derrota de Yaquis la noche del sábado en Tepic. La limpia que recibió la tribu ante Jaguares que, sin duda, es un gran equipo que dará pelea esta misma temporada como ya se está viendo. Yaquis sigue en primer sitio gracias a que Naranjeros y Cañeros mordieron el polvo en Mazatlán y Mexicali, respectivamente. Sin embargo, ahora son tres los equipos que están a un juego de Yaquis pues hay que sumar a Charros que tiene un empate con Naranjeros y Verdes de Los Mochis.
CON TODO.- Si bien es cierto que jugadores noveles en Yaquis deben recibir oportunidades, en estos momentos es hora de ir con todo en las dos series que le resta a esta primera vuelta. Se trata de buscar, si no un primer sitio, al menos ubicarse dentro de los primeros tres lugares para lograr la puntuación ideal para buscar tener una segunda vuelta sin presiones. ¿Qué tal regresar a la alineación a Víctor Mendoza, pero jugando a la defensiva en la primera base?. Por muchos factores es necesaria la presencia de la “Chule” jugando la inicial. Tal vez las cosas cambiarían con el toletero obregonense y ya no se sentiría relegado a roles como bateador designado, solamente.
CAMBIAN.- Si bien las derrotas dejan cosas interesantes, no es raro señalar que, desde la serie ante Águilas de Mexicali, el manejador Gabe Álvarez se ha visto un tanto distinto a la hora de enviar sus jugadas. Y un ejemplo claro lo vivimos ayer domingo cuando se necesitaba un corredor en posición de anotar. Al bat llegó Guillermo Williamson con la obligación de toca la pelota pues no había out. Todo mundo pensó que la orden obligada sería el de sacrificarse para enviar al corredor a la segunda colchoneta. Pero no hubo orden y se perdió la oportunidad de ponerlo, insistimos, en la segunda base.
OBVIO.- Si bien es verdad que Williamson no es un buen tocador de pelota. ¿Porqué, entonces, no enviar a Víctor Márquez que sí sabe responder a una orden que todos esperábamos, más que nada por lógica?. No se vieron, repetimos, las ganas de pelear un juego que estaba al alcance aun con todo y estar en desventaja. Obvio que no se deben dar concesiones al rival. Al contario, no hay que perder la oportunidad de rematarlo, si es preciso, con tal de conseguir los triunfos.
MAL.- No sabemos si algún directivo esté en la caseta de Yaquis durante las giras. Al menos cuando se visitó a Naranjeros, Manolo Vélez allí estuvo. Y en los juegos de local, ha estado aparte de Nicolás García Jr., en un compartimiento pegado a la caseta. Como que no está correcto eso. Se puede presumir a que la presencia de directivos a un lado de la caseta del equipo, puede ejercer cierta presión a los jugadores, cuerpo técnico, e incluso al propio manejador. Esto no ha pasado desapercibido entre los seguidores del equipo.
APARENTEMENTE.- Entre los inmiscuidos por terminar en los primeros sitios, a Yaquis, en el papel, le toca enfrentar a los dos supuestos equipos más débiles. Sí, primero a Algodoneros jugando de local y a Venados visitándolos el puerto. Seguramente en Mazatlán, enfrentarán a José Urquidy, el mismo que fue sometido a la Tommy John y, al parecer, quedó hasta mejor que antes pues así lo está enseñando. Naranjeros y Cañeros librarán una tremenda serie. Jaguares visitará a Charros que es difícil de derrotar en el Panamericano, luego los tapatíos cierran en Guasave.
LUEGO SEGUIMOS.


