Milton Martínez Estrada

Los Harfuch y el turismo policiaco

¿A qué vinieron realmente Los Harfuch o Unidad Nacional de Operaciones al norte de Sonora? No solo es La Siguiente Pregunta es la única pregunta.

Este domingo se cumplió exactamente una semana desde que llegó a Nogales el grupo de élite de la Secretaría de Seguridad Pública y Protección Ciudadana (SSP y PC) y su presencia ha generado nulos resultados.

Y no es que este quien les escribe esté predispuesto a la crítica directa contra la autoridad, pero para nadie es un secreto que el norte de Sonora, principalmente Nogales, es un bastión de los Barones de la Droga.

Entonces, si un cuerpo policiaco especializado en combatir al crimen organizado no asesta un solo golpe a la delincuencia en siete días de actividades, las críticas o los cuestionamientos son inevitables.

Esta ineficacia de Los Harfuch en Nogales, me recuerda el viejo dicho de un ex ministerio público que es mi amigo personal: ‘Autoridad que no ofrece resultados es caja registradora’.

Si esta reveladora expresión proviene de un extrabajador de la fiscalía sonorense, seguro que es un argumento de autoridad basado en la experiencia.

Ustedes se preguntarán, a qué viene este despacho periodístico y la respuesta es más que sencilla y obvia: Si una corporación con tantos recursos como elementos especializados llega a la ciudad, lo menos que se espera son importantes golpes a la delincuencia.

¿O de qué sirve tanto presupuesto y agentes experimentados que solo parece que vienen a pasearse?

Ya lo entendieron. Es por eso que en la entrega de este lunes se titula ‘Los Harfuch y el turismo policiaco’ porque si no logran resultados destacables, su viaje será inútil.

A través de redes sociales los han denunciado de estar por fuera de las garitas de Nogales, a la espera de los automovilistas que provienen de Estados Unidos.

Los paisanos que publicaron su experiencia en redes sociales reconocieron que Los Harfuch son de trato amable, no obstante exigieron todos los recibos de compra a quienes fueron revisados.

Es imposible de creer que este cuerpo de élite únicamente haya viajado desde la Ciudad de México para esperar a los paisanos que regresan a nuestro país con camionetas llenas de artículos para sus familiares y amistades.

También fueron señalados de realizar revisiones sobre la carretera internacional México-15, en la comunidad rural nogalense, de nombre Mascareñas, donde aprovecharon un tope reductor de velocidad para montar un operativo y practicar sus inspecciones.

Insisto, en estos siete días de actividades fronterizas se han concentrado en registrar ciudadanos y nada de hacerle frente a los malosos.

Se supone que la Unidad Nacional de Operaciones se caracteriza por su labor de inteligencia policial, sin embargo esta cualidad pasa inadvertida cuando recorren la ciudad en columna de 10 o 15 patrullas.

El menos entendido en estrategia policiaca sabe que es un grave error desplazarse con tantas unidades en una ciudad con pocas vialidades porque facilitan el ser atacados.

Antes de comentarles tres aciertos que han logrado, les voy a reseñar el origen de esta Unidad Nacional de Operaciones, conocidos como Los Harfuch y que se autoproclaman como El mejor escudo de México.

La Unidad Nacional de Operaciones (UNO) se creó en marzo de 2025, por parte del titular de la Secretaría de Seguridad Pública y Protección Ciudadana (SSP y PC), Omar García Harfuch.

De acuerdo con informes oficiales, la UNO se fundó como parte de una estrategia de seguridad para combatir el crimen organizado y está compuesta por elementos de la policía de la Ciudad de México, la Coordinación Nacional Antisecuestro y exagentes de la extinta Policía Federal.

Los Harfuch nacieron con el objetivo principal de neutralizar amenazas en tierra, aire y agua, incluyendo operaciones en el control de situaciones de emergencia y el rescate de rehenes.

Si ustedes leyeron lo anterior, entenderán que es poquísima cosa para este cuerpo de élite de la policía andar revisando bolsas con despensa comprada en los Estados Unidos.

 A continuación tres acciones de la UNO, que considero razonables:

I

 Me revelan mis fuentes al interior de varias corporaciones que Los Harfuch no se han coordinado con otras autoridades locales, estatales y federales. Lo cual considero positivo porque no se dejarán llevar influencias externas.

II

También me informan que la presencia de las 30 patrullas que llegaron al norte de Sonora inhibieron un sinnúmero de conductas criminales. (‘Volaron TODOS los pavorreales de la ciudad’, me dijeron pero no entendí).  

III

Y lo más importante que escuché, es que Los Harfuch arribaron a la frontera siguiendo una pista del huachicol fiscal. Esto sí es una verdadera noticia porque este delito ha representado un quebranto anual de 60 mil millones de pesos a la hacienda pública por los últimos siete años.

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