Óscar Félix / MO
El tramo del Canal de la 300, a la altura donde se instalan una importante concentración de puestos de comida especializada en mariscos y otros alimentos, ha sido señalado como un foco de contaminación y un masivo criadero de mosquitos, generando una preocupación creciente entre los comensales.
La acumulación de desechos y las condiciones de salubridad en el canal, vital para el drenaje pluvial y agrícola de la zona, están creando un ambiente ideal para la proliferación de plagas.

Los habitantes de la colonia Primero de Mayo son quienes sufren con mayor rigor las consecuencias de este problema ambiental.
La constante presencia de mosquitos ha escalado hasta convertirse en una verdadera plaga, aumentando el riesgo de enfermedades transmitidas por vectores como el dengue, el zika y el chikungunya.
Si bien los puestos de comida de la zona son muy concurridos por su oferta de mariscos frescos y otros platillos, el estado actual del canal representa un riesgo potencial para la salud pública.

Es necesario una jornada de limpieza profunda y desazolve del canal, así como una campaña de fumigación.


