A PESAR DEL TRABAJO que ha desplegado la Fiscalía General de Justicia del Estado (FGJE) a través de la Agencia Ministerial de Investigación Criminal (AMIC) con apoyo de la Coordinación Nacional Antisecuestros (Conase), no ceden los ataques armados y homicidios dolosos provocados en su mayoría con proyectiles de arma de fuego. Durante el sábado se cometieron dos ataques armados, pero en realidad hubo tres muertes violentas. Inicialmente en una fosa clandestina ubicada en calles 500 y Kino, se localizó un cadáver que se estima tiene menos de dos meses de fallecido. Estaba dentro de una bolsa de plástico de color negro. Indudablemente que ese caso se va la estadística de ejecutados. En esa misma área, integrantes del colectivo, Rastreadoras de Ciudad Obregón, localizaron dos osamentas más y ya suman 29 en los primeros diecinueve días del mes de marzo. En esperanza fue asesinado un hombre con disparos calibre 9 milímetros, según los indicios balísticos que se localizaron en los alrededores del cadáver. Más tarde, casi al anochecer del mismo sábado en el centro de la Comisaría de Pueblo Yaqui, fue hallado el cuerpo sin vida de un masculino no identificado, quien fue acuchillado en una inmueble en abandono. Con ese caso ya sumaban tres muertes violentas. Por la noche, en la colonia San Anselmo, gatilleros a sueldo estuvieron a punto de asesinar a una mujer de 39 años, cuyo marido fue ultimado muy cerca de su domicilio ubicado en calle Valle Colorado, hace aproximadamente diez días. Por fortuna, la mujer solo recibió un impacto de bala en la parte superior de la pierna izquierda, luego de una decena que le dispararon cuando estaba por fuera de su casa. Es importante que las autoridades investigadoras tomen en cuenta que la Valle Colorado desde la calle Bataconcica hasta la Valle del Norte está convertida en una zona de muerte, por lo que deben intensificar las pesquisas y descartar que por ahí cerca exista alguna “guarida” de entes criminales que no dejan rastros de su huida, por lo que no se descarta que se refugien muy cerca de ese sector… JUSTAMENTE AYER, la fiscalía estatal dio a conocer que en el periodo comprendido del 25 de enero al 15 de marzo, se han capturado a once personas, entre estas, tres mujeres e igual número de menores de edad, en once cateos realizados en las colonias Sochiloa, Libertad, Villas del Trigo, Santa Fe, Benito Juárez, Cortinas, Luis Echeverría, Casa Blanca, del Valle, Posada del Sol y Misiones, sección Misión del Prado, donde además se aseguraron seis armas largas y una pistola, así como 229 cartuchos útiles y casi setecientas dosis de “crystal” y treinta y ocho de marihuana. Indiscutiblemente que los números son reales, debido a que son constantes los desplazamientos de policías ministeriales y federales. Trabajan con demasiado sigilo que, al tratar de ubicarlos cuando son observados en caravanas, nadie los encuentra y eso precisamente saber trabajar con inteligencia y extremada discreción por parte del comandante local de la AMIC, Ramsés Arce Fierro, quien hizo los movimientos necesarios del personal a su cargo y esto ha contribuido a que no haya fuga de información como sucedía meses atrás, donde los ministeriales no eran ni siquiera la sombra de lo que ahora son al estar haciéndole frente a la delincuencia, pero con labores de inteligencia que resulta fundamental, esto, si en verdad se busca obtener logros… APENAS COMENZABA la noche del sábado anterior, cuando en calles 6 de abril entre Campeche y California, se originó una confrontación entre militares y ocupantes de la patrulla 147 de la Policía Municipal, Delegación Náinari. Tal parece que los mílites trataron de revisar a la tripulación de la referida unidad policíaca e ipso facto se encendieron los ánimos entre la tropa policial, pero el asunto se diluyó rápidamente, debido a la presunta intervención de un alto mando de la secretaria de Seguridad Pública. Ante este panorama resulta primordial que el delegado estatal de la Fiscalía General de la República (FGR), en Sonora, Francisco Sergio Méndez, sostenga una reunión con mandos militares del 60 y 85 Batallón de Infantería y los encargados de la Guardia Nacional, así como de la secretaria de la Marina y por supuesto que el comisario de Policía, capitán de navío, Claudio Cruz Hernández, para que tomen las medidas de apremio y así evitar que eventualmente vaya a darse un enfrentamiento armado entre policías y soldados. No hay que olvidar lo sucedido en el centro de la Comisaría de Esperanza, donde milites agredieron a golpes al agente preventivo, José Trinidad Gil Salazar, a quien le dejaron una marca en el pómulo derecho, además de que los soldados cortaron cartucho a sus armas de alto poder, cuando la mayoría de los policías no son los enemigos a vencer sino los delincuentes. Aquí resulta primordial que también participe en una reunión que debería de darse, el comandante de la 4ta Zona Militar, general, Jorge Ambia Minero y establecer las reglas sobre la mesa. De lo contrario, se corre el riesgo que alguno de ellos vaya a jalar el gatillo de su arma de cargo y todo termine en una desgracia que, se puede y debe prevenir. Insistimos, no es la primera ocasión que los gendarmes son humillados por soldados, de ahí que dicen ya no estar dispuestos a dejarse vejar por nadie, así que más vale un buen acuerdo que un pleito innecesario… EL MEDIODÍA del sábado fue localizada, sana y salva deambulando por calles de la colonia San Rafael, una menor de 17 años, que dijo haber sido privada ilegalmente de la libertad por tres sujetos que según ella, le golpearon la cabeza, ocasionando que perdiera el conocimiento. Lo anterior, sucedió luego de que salió de clases del Conalep el viernes al mediodía y se dirigió a esperar el autobús urbano que la trasladaría a la colonia Óscar Russo Vogel, donde tiene su domicilio. Sus familiares comenzaron a buscarla desde el viernes en la noche, después de que no llegó a su hogar. La adolescente recobró el conocimiento cuando vagaba por calles de la colonia Primero de Mayo. Tal parece que no hubo llamadas de posibles extorsionadores telefónicos, por lo que se descarta que se trata de una acción de esa naturaleza. Finalmente, la menor fue localizada por elementos del Grupo de Investigación a cargo del comandante, Israel Martínez Domínguez, quienes la trasladaron a su vivienda y entregaron a sus padres. El asunto debe encender los focos rojos del encargado de la seguridad pública del municipio, en el sentido de que debe exigir a los mandos medios no descuidar la vigilancia en los perímetros escolares. Esa área le corresponde al comandante, Miguel Roberto Beltrán Cuamea, quien tendrá que hacer “milagros” para cumplir con esa vigilancia, ya que no dispone de las unidades y personal suficiente y es ahí donde se debe priorizar la vigilancia y prevención del delito… LA MADRUGADA de ayer, hubo balas en San José de Bácum, donde se celebran las fiestas patronales, y como siempre la Policía Estatal de Seguridad Pública (PESP) a cargo del comandante, José Luis Rico Farías con apoyo de personal de la Marina, le hicieron frente a un grupo armado y terminaron por asegurarles importante cantidad de armamento, cartuchos y equipo táctico, así como un vehículo, según dio a conocer a través de un comunicado la secretaría de Seguridad Pública del Estado a cargo de María Dolores del Río Sánchez y esto resulta interesante, a fin de no dejar que la delincuencia haga y deshaga en el vecino municipio de Bácum, cuyo encargado de Policía Preventiva y Tránsito Municipal, Óscar Verdugo Amparano, se hace el invisible cuando ocurren ese tipo de acontecimientos. Nadie lo encuentra por ningún lado. Es un auténtico florero, el negligente ex Policía Federal de Caminos, pero no tiene la culpa el indio… Luego seguimos, Dios mediante.

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