DURANTE MESES, LOS PARTIDOS PRI, PAN Y PRD QUE COMPITIERON CONTRA MORENA POR LA GUBERNATURA DE SONORA EN EL 2021 han mantenido una narrativa en donde presumen de acuerdos cupulares traiciones y deslealtades con las cuales les arrebataron la posibilidad y oportunidad de ganar la elección.
Han desplegado desde distintos espacios, el contenido de su discurso en donde acusan a la ex gobernadora Claudia Pavlovich de haber “entregado” el estado a Morena y propiciado con su alejamiento del PRI, el arribo de Alfonso Durazo Montaño al ejecutivo estatal.
Esa ha sido la principal argumentación de priístas y panistas para justificar la aplastante derrota que sufrieron el año pasado en las urnas y que en estos momentos los tienen en condiciones de precariedad política y administrativa.
Los dirigentes, los grupos de poder internos que aún les quedan, han realizado infinidad de análisis, mesas de café, encuentros de sus genios electorales, todos los instrumentos a su alcance, para tratar de “encontrar” el motivo de esa humillante derrota electoral.
“Claudia Pavlovich es una traidora porque entregó el estado”, “dejó solo al candidato de la alianza PRI-PAN”, “no defendió a su partido”, entre otras frases, son parte del discurso de quienes encabezan a esos partidos y de sus seguidores.
Sin embargo, la realidad de las cosas es que en el centro del país cuentan ya con un informe certero, un análisis irrebatible, en donde se describen las causas de esa derrota electoral que además se replicó en otros estados.
Y la causa fue muy sencilla:
La alianza opositora estuvo mermada por egoísmos de grupos, y en ese proyecto electoral “pudieron más las ambiciones personales o partidistas y, ante su miopía colectiva, Palacio Nacional y sus operadores electorales emergieron como los principales ganadores”.
Ellos, los grupos de poder en el plano nacional, consideran que pudieron arrasar en las elecciones: hacerse de la Cámara de Diputados, de varias gubernaturas, entre ellas la de Sonora y del control de la Ciudad de México.
Con ese documento, echan por tierra cualquier intento de justificar la derrota del año pasado, les dejan sin narrativa a los priístas, panistas y perredistas de los Estados señalando supuestas traiciones internas y les ofrecen la oportunidad de recuperar los espacios que perdieron.
Sin embargo, al menos en Sonora, será complicado que logren mejorar esa oportunidad, porque tanto el PRI como el PAN carecen en estos momentos del activo principal para que funcione una organización política: la confianza y la credibilidad de la gente.
Ya decíamos sobre el PRI y de sus intenciones por reagruparse y tratar de colocarse en la agenda del debate en el estado con el proceso de renovación de los cuadros estatales.
Proceso que, por cierto, no han logrado posicionar como uno de los temas de interés en el colectivo sonorense.
Por lo que respecta al PAN, su dirigente estatal Gildardo Real hace intentos para acercarse a la militancia que le queda al partido de la derecha.
La militancia real, la que siempre ha estado con ellos, los más dogmáticos, los tradicionalistas, que en realidad son los menos.
El panismo sonorense tiene un poco más de cercanía con los sectores de la clase media, pero estos empiezan a alinearse a las nuevas tendencias partidistas del Estado, a los grupos de poder que tomarán las decisiones hacia los próximos años y tratarán de garantizar su permanencia en ese sector de la sociedad con los acuerdos que logren concretar.
El PAN… en el PAN batallan igual que los del PRI, para que la sociedad en general voltee a verlos, a escucharlos, a atender su discurso y sus propuestas.
Eso lo saben a nivel nacional porque sucede en todas las regiones del País.
Así es que ambas organizaciones políticas que se aliaron en el 2021 deberán construir sus prospecciones de manera separada porque así, separados, seguramente irán en el 2024.
EXTENUANTE SERÁ LA 19 GIRA DE TRABAJO QUE REALIZARÁ A SONORA EL PRESIDENTE ANDRÉS MANUEL López Obrador, y la mayoría de los funcionarios estatales están preparados para recorrer largas trayectorias para estar presentes en los eventos.
De Álamos a Huatabampo, a Cajeme, a Sahuaripa, al Desemboque… y en un solo día, será el recorrido del presidente de la República para el próximo fin de semana.
Más lo que se acumule.