El Valle del Yaqui sembró más de 138 mil hectáreas de trigo, donde el 85% de esta área fue dedicada a la variedad cristalina, continuando como el preferido de los productores, mientras que el panificable se quedó solo con el 15%.
Ante esto, el ingeniero Alberto Borbón García, investigador del Campo Experimental Norman E. Borlaug, informó que la semilla Cirno C-2008 fue la más plantada por los productores, pero esta ya es susceptible a enfermedades como la roya.
“Siguen sembrando esta variedad, tiene muy buenos rendimientos, de 8 toneladas por hectárea, pero todos saben que es vulnerable a la roya y existen mejores opciones de siembra en este momento”, alertó.
Borbón García, mencionó que, los agricultores que apostaron por esta variedad, tendrán que aplicar hasta dos aplicaciones de herbicidas para poder mantener el rendimiento al que se está acostumbrado.
Añadió que, por el momento la planta aún se encuentra en desarrollo, por lo que no se tiene registro de enfermedades y plagas en las parcelas del Valle del Yaqui, aun así, llama a los productores a estar atentos a cada momento sobre las indicaciones de sanidad en los cultivos.