Fabiola Navarro / MO
A los dos años, debido a que nació con pie equinovaro (una malformación congénita que afecta músculos y huesos de los pies), a Astrid América debieron amputarle una de sus extremidades.
Actualmente tiene 12 años de edad y cursa su educación secundaria en la comunidad del Paredón Colorado, donde se destaca por ser una alumna disciplinada en sus estudios, además de su gran optimismo y alegría que contagia a sus compañeros y hasta al mismo personal docente, de acuerdo a comentarios de maestros de la institución.
Pero para Astrid, la vida no ha sido fácil, hace un año murió su papá a causa de un derrame cerebral y ahora su mamá debe hacerse sola, cargo de ella y dos hijos más. Diariamente, recorre en su silla de ruedas un largo camino para llegar a la escuela y de regreso es apoyada por otros estudiantes.
A pesar de su condición, Astrid mantienen su optimismo y esperanza en el futuro, deseando ser maestra.
“Yo digo que quiero ser maestra, porque me nace ser, ahorita mi materia favorita es la de informática”, comentó la adolescente mientras sus compañeras la apoyaban empujando su silla de ruedas y cargando la andadera que utiliza cuando está de pie.
Cabe mencionar, que Astrid fue seleccionada por el Gobierno del Estado para hacerle entrega de una silla de ruedas, la cual iba a ser entregada por el propio Gobernador, Alfonso Durazo en el plantel.
Sin embargo, por cuestiones de agenda el mandatario pospuso el evento y ahora la pequeña sigue a la espera de una silla de ruedas nueva.