Fabiola Navarro / MO
La captura de callo de hacha en comunidades como el Paredón Colorado y el Paredoncito, se ha visto limitada por la presencia de tiburones blancos, al igual que el año pasado y recientemente se le vio a uno de estos comerse a una ballena.
Florentino Jusacamea, alcalde de Benito Juárez, señaló que la pesca ha estado baja esta temporada y por panga se capturan menos de 5 kilos diarios que se dividen entre 3 pescadores.
Ante ello, se han conseguido 57 brazaletes que impiden el ataque de tiburones a pescadores y faltan poco más de 70, para que puedan salir más trabajadores al mar a la captura de callo.
Anda en 1000 pesos al pescador (kilo de callo), se vende en 1,400 pesos en Mazatlán, es una pesca que reactiva la economía y no podemos dejarla por fuera”.
” De los 57 brazaletes que hemos entregado, estamos hablando que faltan 70 más, le pedimos al pescador que ponga una parte, el municipio otra y el Gobierno del Estado otra, tienen un costo de 3 mil pesos a 3,500 pesos”, señaló.
Recordó que él tiene una cooperativa pesquera y fue precisamente uno de sus trabajadores quien falleció el año pasado, víctima de un ataque de tiburón.
Por ello, la pesca se ha limitado y las pangas no salen si no se cuenta con brazaletes para la protección de los pescadores.