Declarado como Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad en el año de 2009 por parte de la UNESCO, el ritual de los Voladores de Papantla es un motivo más para estar orgullosos sobre la identidad, las tradiciones y la vasta cultura con la que cuenta el estado de Veracruz.
Prueba de ello es la admiración, el amor y respeto que Luisito, un niño de Hermosillo, tiene hacia esta danza representativa de la zona de Papantla al poder tener la ilusión de formar parte de este ritual.
Fue mediante Instagram que la nutrióloga Ericka Mota mostró en una serie de videos cómo fue la historia de amor de su pequeño hijo hacia este ritual.
“No conozco niño más enamorado de esta tradición… Luisito no tiene familia en Veracruz”, es parte de los comentarios que la joven añade en su video mientras muestra el interés de su hijo por los Voladores de Papantla.
Su sueño se vio completamente realizado al hacer un viaje a tierras papantecas para estar cerca de sus héroes a los que, finalmente, pudo conocer de cerca, además de tener la oportunidad de tomarse una foto con uno de ellos.
Con una sonrisa enorme y ojos llenos de un brillo inigualable, Luisito pudo observar en persona cómo los Voladores de Papantla realizaban su ceremonia en todo lo alto del mástil, pero la sorpresa no acabaría ahí.
Con el objetivo de preservar la cultura Totonaca, a este recinto fue invitado Luisito, sitio en donde logró ser testigo y partícipe de la preparación por la que muchos jóvenes pasan para realizar las tradicionales danzas, además de tener la oportunidad de poder subirse a un mástil adaptado.
Después de varias prácticas en casa, Luisito tomó la decisión de pasar a la acción al subirse con sus compañeros a dicho mástil y, con ayuda de su maestro, realizarlo con total éxito. Sin temor alguno, el pequeño incluso cruzó sus pies para hacer diversos giros mientras se extiende por completo, demostrando así que está más que preparado para formar parte de los emblemáticos Voladores de Papantla.