Dayan Lagarda / MO
La enfermedad de ‘panza blanca’ en el trigo merma la calidad de producción en el Valle del Yaqui, por lo que investigadores se han dado a la tarea de crear estrategias para contrarrestar este inconveniente que si no es atendido ocasiona problemas en la comercialización.
Juan Manuel Cortés Jiménez, investigador de Inifap, expresó que este tema es algo presente año con año, por lo que se le recomienda al productor hacer diferentes acciones para proteger el grano, como auxiliar con nitrógeno en la etapa reproductiva.
Detalló que esta estrategia implica aplicar dicho insumo durante el segundo riego, específicamente durante la etapa de espigamiento, ya que en este momento la mayor parte del nitrógeno se destina a mejorar la calidad del grano y no tiene tanto impacto en el rendimiento.
El investigador señaló que también está la fertilización, la cual debe aplicarse entre presiembra, siembra y primer riego, pero esta va prácticamente a rendimiento y solo un poco a calidad, cuando aplican una cantidad suficiente de más de 300 unidades.
Añadió que, si no desean aumentar los costos en fertilizantes, deben fraccionar la aplicación; una parte en la presiembra o en la siembra, otra durante el primer riego y una tercera durante el segundo riego, ejercicios que minimizaran los problemas de panza blanca.