Un nuevo plan de la NASA –enmarcado en el programa de Conceptos Avanzados Innovadores (NIAC, por sus siglas en inglés)– no solo tiene como objetivo final llevar humanos a Marte, sino a su vez superar el principal obstáculo que se interpone en esta misión: la enorme distancia entre ambos planetas.
Con un sistema de propulsión desarrollado por Howe Industries que “puede generar hasta 100.000 Newtons de empuje con un impulso específico (ISP) de 5.000 segundos”, según indica el comunicado oficial de la NASA, se estima que el tiempo de llegada podría reducirse a 2 meses, frente a los 5-10 estimados hasta ahora.
Bautizado como cohete de plasma pulsado (PPR, por sus siglas en inglés), este nuevo sistema podría revolucionar el panorama futuro de la civilización espacial. Y es que, de acuerdo con la información oficial, presenta la capacidad de mover tanto carga como humanos de manera eficiente y rápida, no solo al planeta rojo, sino también a otras ubicaciones lejanas como el Cinturón de Asteroides.
El cohete nace del concepto de fusión de fisión pulsada, el cual utiliza explosiones nucleares para generar fuerza de empuje (medida en Newtons), “pero es más pequeño, más simple y más asequible” que el prototipo planteado por primera vez (y nunca culminado) por Stanislaw Ulam en 1946, durante el Proyecto Manhattan.
El sistema de propulsión desarrollado por Howe Industries, que ya ha recibido la financiación de la NASA, forma parte de un programa mucho más amplio: el NIAC. Este fue creado originalmente en 1998 y funcionó hasta 2007, para más tarde reestablecerse en 2011, y tiene como objetivo ofrecer respaldo a “estudios en etapas iniciales para evaluar la viabilidad de tecnologías que podrían respaldar futuras misiones aeronáuticas y espaciales”.
Recientemente la agencia ha anunciado que todos estos conceptos tecnológicos innovadores, “similares a los de la ciencia ficción”, ya han superado su fase I de estudio, y por ello se estima que en 2024 inicien la siguiente etapa, para la que se destinarán alrededor de 600.000 dólares.
Para alcanzar esa meta, es posible que todavía quede mucho tiempo y trabajo por delante, y esto se debe a que las propuestas de la comunidad científica avanzan a una velocidad mayor que la sofisticación de los recursos tecnológicos. Sin embargo, la NASA está involucrando a los mejores y más innovadores empresarios del país para alcanzar su “sueño” de transportar humanos a Marte: un hito que cada vez parece estar más cerca de hacerse realidad.