Este jueves un fuerte incendio consumió en su totalidad el casino Royal Yak, ubicado en la Plaza Cinépolis del municipio de Culiacán, en el estado de Sinaloa.
Dicho casino forma parte de una cadena internacional de establecimientos dedicados a los juegos de azar, el cual tuvo que ser desalojado de manera inmediata debido a las llamas que se extendían de un sitio de juegos infantiles y brincolines ubicado a un costado, el cual también fue consumido por el fuego.
Según el director de Protección Civil, Roy Navarrete, el fuego se originó por un corto circuito detectado en el sitio, sin embargo aún realizan labores de peritaje para determinar la causa exacta del fuego.
Por su parte, la Guardia Nacional informó que fue activado el Plan DN-III-E para auxiliar a la población luego de que se registrara el incendio del casino con el fin de facilitar las tareas de los cuerpos de protección civil y evitar riesgos a la ciudadanía.
Según reportes, dos personas resultaron lesionadas debido al incendio, y se detalló que una tuvo que ser trasladada a un hospital para recibir atención médica de emergencia.
El casino Royal Yak forma parte de la familia Codere. Dicha empresa se dedica a brindar entretenimiento mediante los juegos de azar en 87 salas distribuidas a nivel nacional.
Los casinos de Codere tienen presencia en la frontera, zona occidente, norte, sur y sureste del país, en los que cuentan con más de 19 mil juegos de azar.
Codere es un operador internacional en el ámbito del entretenimiento y el juego, el cuenta con más de cuarenta años de experiencia y presencia en países como España, Italia, Argentina, México, Panamá, Colombia y Uruguay.
Esta compañía opera máquinas de juego, puestos de bingo y terminales de apuestas deportivas tanto en línea como en puntos de venta que incluyen salas de juego, bares, salas de apuestas e hipódromos.
La empresa española fue fundada por los hermanos José Antonio Martínez Sampedro y Luis Javier Martínez Sampedro, pero en 2021 la compañía sufrió una restructuración debido a su incapacidad para pagar una deuda. Con esto se abrió paso a que los accionistas tomaran el control de la empresa y que los fundadores quedaran fuera.
Codere mantiene a la cabeza a Gonzaga Higuero como CEO de la empresa. La llegada de la compañía a México fue en el año 1998 tras las alianzas firmadas con CIE y Grupo Caliente.