Martin Mendoza / MO

Después de que la tarde noche de este viernes 31, Cajeme vivió otro embate del crimen con tres asesinatos, concluyó el mes 77 homicidios y 735 en 2021.
De esta forma, se constituye en el índice de crímenes más elevado del que jamás se tenga historia en la segunda ciudad más importante de Sonora.
Esto luego, de que el 2020 cerró con 498 ejecuciones, aunque la Fiscalía General de Justicia del Estado (FGJE) atenuó la cifra, al referir que esa dependencia solo inició 411 carpetas de investigación.
Diciembre concluyó como el tercer mes más violento del 2021 atrás de julio con 79 y octubre con 84 homicidios dolosos.
Se caracterizó por registrar la cifra más elevada de muertes de mujeres con seis y dos menores de edad.
La mayoría de las ejecuciones fueron cometidas con armas de fuego, principalmente con fusiles como AK 47 y AR-15.
Salvo el caso de un hombre del ejido Quetchuehueca que fue ultimado a golpes.
Uno de los episodios más atroces consistió en el hallazgo de un matrimonio que radicaba en la colonia Valle Dorado. Se localizó dentro de su vehículo completamente calcinado.
Fue hallado en calle 10 entre 500 y media y 600, Valle del Yaqui, así como el asesinato de un adolescente y su madre, en su vivienda situada, en la colonia Leandro Valle de la Comisaría de Esperanza.
Hubo múltiples ataques armados en Esperanza con tres asesinatos en un solo ataque, lo mismo sucedió en la colonia Hidalgo, así como en Providencia y el centro de la ciudad.
En el contexto de los hechos, solo hubo un detenido tras dar muerte a un hombre en calle Norman E. Borlaug entre Águila y CTM, en un negocio de compraventa de autos usados.
Personal militar aseguró al presunto sicario, recogiéndole una pistola calibre 40 milímetros.
También la Policía Estatal de Seguridad Pública (PESP), capturó a uno de dos presuntos gatilleros que los agredieron con rifles AK 47. El otro quedó abatido en el interior de un automóvil, en la colonia Villa California.
De ahí, en el plano general los operativos de vigilancia y prevención del delito implementados por autoridades de los tres órdenes de gobierno fueron rebasados por la delincuencia, al no lograr contener el espiral de muertes violentas, lo que coloca a Cajeme en los primeros escaños del ranking nacional, como de los municipios más violentos del país.

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