Marco Antonio Palma / MO
Pese a las lluvias que se registraron durante los últimos meses, la sequía que impactó a la región fue tan drástica que los ganaderos tuvieron un fuerte impacto en los establos, lo que provocó que muy pocos tuvieran alguna recuperación.
“Si fue un buen año llovedor, pero el problema es que los mismos quedaron en una media y no en una situación excepcional, nosotros esperábamos lluvias de invierno, cayeron algunas lloviznas, pero fue muy poco y no fue muy suficiente”, comentó.
Dijo que seguramente volverá de nuevo la sequía, pero que esperan que esta no sea tan fuerte como la que vivieron en la temporada anterior.
“Con lo que tenemos en la actualidad en cuando a pasto y agua, no creemos que lleguemos a las aguas de los próximos meses, tendremos más pasto que agua ya que se está empezando a escasear y los mantos freáticos cada día se siguen bajando aún más, se recuperaron un poco pero no fue suficiente”, aseveró.
Ricardo Alcalá indicó también que de aquí a que llueva, le falta mucho, ya que se está hablando de medio año más, “podemos decir que hay ganaderos que está en una situación cómoda, pero también hay ranchos que no quedaron en la misma situación”.
Citó que no es una situación alarmante, pero calculó que, a partir de abril próximo, tendrá que proceder a dar comida y seguramente que el agua será el problema más fuerte que se tendrá que enfrentar, ya que es notorio como están bajando los niveles de los mantos freáticos, “la incertidumbre es en torno al agua de abrevadero, a algunos represos todavía les queda el recurso hídrico, pero te insisto el vital líquido será el más delicado”.