HASTA EL ATARDECER del martes ya sumaban veintiséis los homicidios en el mes junio, en tan solo catorce días, lo cual no resulta nada halagador para los operadores policíacos, que ya no hallan a que santo encomendarse para que disminuya la tendencia criminal que no cede bajo ninguna circunstancia, por lo que tendrán que modificar de manera constante sus estrategias a fin de no bajar la guardia en la batalla que libran a diario contra emisarios de la muerte que pululan tanto en la ciudad como en Comisarías y Delegaciones. Esto, debe quedarle muy claro al responsable de la Seguridad Pública en Cajeme, capitán de navío de la Marina, Claudio Cruz Hernández, quien seguramente ya entendió que no se puede dar un respiro de tregua a los delincuentes, por lo que resulta muy prolífico la apertura de las cinco bases operativas de la Guardia Nacional en sectores considerados como neurálgicos, en cuanto a la incidencia delictiva. Indudablemente que se trata de una buena táctica que permitirá reforzar la vigilancia en los asentamientos humanos que registran mayor derramamiento de sangre. Lo malo consistió en anunciarlo públicamente. Se entiende y comprende que el jefe de la comuna, Carlos Javier Lamarque Cano, es uno de los que están más desesperados por hacerle llegar a la población ese elevado sentido de preocupación que les agobia, pero, en ocasiones resulta necesario no enseñar las cartas del juego y menos a estos especímenes criminales que, de manera muy dispendiosa han gozado de ilimitada impunidad, al grado de sentirse intocables porque luego recurren cobardemente a las amenazas telefónicas para tratar de hacer sentir su potestad, aunque se espera que cada vez se vea más socavado ese imperio de poder, más con el trabajo en conjunto que diario realizan soldados, marinos, guardias nacionales, agentes federales de la Coordinación Nacional Antisecuestros (Conase) con apoyo de la Agencia Ministerial de Investigación Criminal (AMIC), Policía Estatal de Seguridad Pública (PESP) y de la Preventiva y Tránsito Municipal que, también han sacado la casta a la hora de la verdad. Solo habría que recordar la persecución que encabezaron desde la colonia Cortinas hasta la cabecera municipal de San Ignacio Río Muerto, donde hirieron a supuesto sicario, quien a estas alturas ya debe estar a disposición de un Juez Control de la judicatura sonorense… PRECISAMENTE ayer, poco antes de las 14:00 horas, en la colonia Leandro Valle, en Esperanza, dos sujetos que abordaban un vehículo sedán estuvieron a punto de cometer la ejecución número 27 de junio, en agravio de un menor de edad que, de no haber corrido como churrea hasta su domicilio donde se refugió de mortíferas balas que le dispararon habría caído abatido, pero esta vez, fracasaron los gatilleros a sueldo que llegaron hasta las afueras de una tienda de abarrotes para darle muerte, pero fallaron y a estas alturas autoridades investigadoras ya deben estar tras ellos, porque hay versiones que fueron identificados. El primero en ponerse en jaque fue el comandante de Policía de la vecina Villa de Esperanza, Guillermo Ceceña Echeverría, quien respiró hondo y profundo al saber que el adolescente solo había sufrido una herida en la mano derecha, luego de que por instinto se cubrió la cara hacia donde iba dirigido uno de los disparos. Después de esto, el hecho provocó la movilización de militares del 83 Batallón de Infantería, estatales y policías ministeriales, hasta que el lesionado fue llevado al Hospital General… APENAS CAÍAN las sombras de la noche cuando se reportó otra persona agredida a balazos, en calles Allende y Tamaulipas, en el centro de la ciudad lo que por igual provocó la intervención de la comandante del Sector 5, Ingrid Miosoty Villa Cruz, quien tampoco debe bajar la guardia en sus tareas de vigilancia y prevención del delito, precisamente porque estos entes no parecen estar dispuestos a detener los ataques armados. De primer momento, la víctima fue reportada como herida. Sin embargo, lo preocupante es la elevada incidencia de sucesos de alto impacto que constantemente se suscitan y en eso tienen que trabajar todas las corporaciones e instituciones armadas para sacar de circulación a estos lastres de la sociedad que nada parece frenarlos. Tal parece que continúan gozando de la protección del crimen uniformado para moverse de un lugar a otro y cometer sus letales actos, porque de otra manera les resultaría complicado y aventurado el perpetrar una agresión sin contar con la información necesaria. En los corrillos policíacos, se dice que estos traidores se incapacitan para servir a ominosos intereses, por lo que no estaría de más que el propio capitán Cruz Hernández y el director administrativo, Luis Alberto Ruiz Coronado, echaran un vistazo a la relación de policías que de manera innecesaria gozan de ese beneficio médico… SOBRE ESTE tema, durante la administración 2012-2015, cuando el hoy fallecido ex titular de la SSPM, Fernando Isaac Apodaca Lauterio, detectó esta grave irregularidad entre la tropa, no solo puso los puntos sobre la íes sino que fustigó y condenó la irresponsabilidad de algunos facultativos, al momento de expedir los documentos que permiten a los derechohabientes gozar de ese beneficio laboral siempre y cuando no estuviera debidamente justificado. Hubo a quienes les fueron suspendidas las incapacidades y obligados a trabajar, porque, aunque no lo crea, había elementos que se encontraban laborando en otras empresas y con la implementación de las enérgicas medidas que implementaron, hubo quienes quedaron descobijados, así que no está de más poner especial atención en esos agentes que se las ingenian para tramitar ese tipo de documentos. De ello ya hay precedentes y por consecuencia resultaría muy saludable revisar tal situación… LA MADRUGADA de ayer, sujetos no identificados provocaron que numerosas familias de la colonia Sóstenes Valenzuela Miller, la popular 410 y la Primero de Mayo, despertaran con sobresalto, tras rafaguear dos domicilios poco antes de las 2:00 de la mañana. Por fortuna no hubo víctimas, pero sí una vecina del lugar fue atendida por paramédicos de Cruz Roja, debido a que sufrió fuerte crisis nerviosa y no es para menos ante semejante suceso que puso en jaque a las autoridades que, insisto, no deben bajar la guardia ni un solo segundo las 24 horas del día. Incluso de ser necesario hay que poner a trabajar al grupo operativo Proxpol junto con infantes de la Marina y agudizar las revisiones y seguro estoy que no demoraran en llegar los resultados. Hay que entender que entre más presencia policíaca y militar exista en el ámbito urbano, esto podría reducir las embestidas de los criminales. Ojalá que esto lo entendiera el director operativo de Policía Preventiva y Tránsito Municipal, Jesús Alberto Navarro Velarde y por igual destinará varias horas de trabajo para predicar con el ejemplo. Deben entender que ya no están los tiempos para el confort, en virtud de que nada parece desalentar las acciones de la delincuencia. Este sector, le corresponde al comandante, Miguel Roberto Beltrán Cuamea, quien trae en sus filas a buenos agentes que no la piensan dos veces para imponer su autoridad y eso es precisamente lo que apremia. De otra forma, se ensancharían las circunstancias para que células criminales no claudiquen en su afán de seguir provocando pérdidas humanas… EN ACCIONES por separado, buen logro se anotaron elementos de la Policía Municipal del Sector dos y del Grupo de Investigación, Roberto Carlos Catarino Hernández Morales e Israel Martínez Domínguez, al capturar a tres sujetos que tenían en su haber más de una docena de robos a mano armada contra tiendas de autoservicios ubicadas en colonias Tepeyac, Hidalgo, Las Brisas, Villas del Náinari y otras aledañas. De seguro que estos rufianes no darán problemas delictivos por una buena temporada… FINALMENTE, hago una disgregación personal, para agradecer al buen amigo, el antes llamado “incorregible”, profesor Adolfo Morales Navarro, por el invaluable apoyo que otorgó a este modesto tundeteclas. Como siempre, una vez más mostró su calidad, calidez y enorme sensibilidad humana… Luego seguimos, Dios mediante.

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *