MALÍ. Veintidós migrantes de Malí, incluidos tres niños, murieron frente a las costas de Libia, anunció el martes el gobierno de Malí.
Los muertos formaban parte de un grupo de 83 migrantes atrapados en un barco en peligro desde el 22 de junio, dijo el Ministerio de Malíes en el extranjero en un comunicado.
De ellos, 61 fueron rescatados, incluidos algunos ciudadanos de Malí, con la ayuda de la agencia de migración de las Naciones Unidas, la OIM.
Ha habido “aumentos significativos” en los flujos de migrantes a través de Níger y Malí hacia el norte de África en el primer trimestre de 2022 en comparación con años anteriores, dijo un portavoz de la OIM.
Los analistas señalan el impacto de la pandemia de Covid-19 y las consecuencias económicas de la guerra en Ucrania como factores determinantes.
El 28 de junio, los cuerpos de 18 personas que según se cree eran de Chad y de otras 2 de Libia fueron recuperados cerca de la frontera con Chad. De acuerdo con los Servicios de Ambulancias y Emergencias de Libia, se piensa que la causa de los decesos fue la deshidratación.
“Las muertes de veinte personas ocurridas ayer en el desierto de Libia constituye un nuevo llamado de atención a toda la comunidad internacional para que reaccione y un recordatorio de que estamos muy lejos de lograr el objetivo de ‘no dejar a nadie atrás’, que es el mantra de la Agenda 2030”, señaló el Jefe de Misión de la OIM en Libia, Federico Soda.