Aunque no es un parámetro para medir el poderío de las Ligas, ya se hizo mala costumbre que la MLS derrote a la MX, ahora en el Juego de Estrellas en Minnesota con gol de don Carlos Vela, el eterno bombardero mexicano que aprovechan los vecinos del Norte.
La categoría de ‘Cracklitos’ queda de patente de inmediato, como si fuera necesario la confirma con un cabezazo a segundo poste aprovechando la mala marca de Angulo. Consentido de la afición, derramó clase.
El bando mexicano tuvo claras: un cabezazo que falló de forma grosera Furch; un derechazo muy cruzado de Escobar y otro disparo de Quiñones.
Para el segundo lapso, revolución absoluta en los dos equipos, nuevos onces. Arriola marcó por la MLS, pero fue anulado al tiempo que un invasor corría por el campo. Nacho Dinenno tuvo un derechazo apenas junto al poste para salir de cambio con 15 minutos.
Alexis Vega entró como cohete de feria, muchas ganas, explosivo, pero pocas decisiones acertadas, como Antuna, su compadre, también acelerado.
La MLS encontró con un dudoso penalti el segundo, obra de Ruidíaz, ex goleador en Liga MX, para vencer a Acevedo, consentido de la cabecera más grande el Allianz Field, repleta de mexicanos, que fueron mayoría cercana al 60%.
El drama llegó: Kevin se animó por derecha fuera del área, metió derechazo raso a cinco del final. La frustración hizo presa del equipo mexicano y de la afición que lanzó el grito prohibido. Al final, el bando estadounidense se la volvió a aplicar al mexicano. Se vuelve una mala costumbre.