La mañana violenta vivida en San Luis Río Colorado el sábado 3 de diciembre redujo a simples espectadores a las fuerzas de seguridad.
De acuerdo a informes periodísticos y oficiales de Baja California y Sonora la batalla empezó del lado californiano y concluyó en terreno estatal.
Se trata de un episodio más entre dos facciones del Cártel de Sinaloa, los colaboradores que dirigen los hijos del capo Joaquín El Chapo Guzmán Loera y los seguidores de Ismael El Mayo Zambada García.
En la zona limítrofe del valle de Mexicali y la comunidad de Luis B Sánchez, de San Luis Río Colorado, se instrumentó una supuesta emboscada de «La Chapiza» contra Jesús Alexander Sánchez Félix, alias «El Ruso», cabecilla que defiende los intereses de El Mayo Zambada.
La refriega tuvo otras dos estaciones y un par de horas de ataques y persecuciones que convirtieron al poblado de Luis B Sánchez en el último campo de batalla.
El siguiente comentario lo expreso a título personal y me deja unas preguntas:
Las policías de los tres niveles de gobierno fueron solo testigos mudos del enfrentamiento.
La heroica y temeraria iniciativa de los ciudadanos nos permitió a la cibercomunidad saber lo que ocurría en el noroeste profundo de Sonora.
Me parece extraño que la fiscalía estatal no haya informado de estos hecho y fue la secretaría de Seguridad Pública que confirmó la muerte de ocho individuos y doce detenidos tras el enfrentamiento.
Aquí, el somero informe compartido por la secretaría de Seguridad sonorense:
«Esta mañana se reportó un enfrentamiento entre dos grupos criminales que inició en una comunidad de Baja California. El enfrentamiento se trasladó al Ejido Luis B. Sanchez, en San Luis Río Colorado, Sonora», cita el primer tuit en donde se informó del acontecimiento.
Luego establece: «En el lugar las fuerzas del estado e integrantes de la mesa de seguridad aseguraron una cantidad importante de vehículos, armamento, equipo táctico, municiones y 3 personas, quienes han quedado a disposición de la Fiscalía General de la República. Tres personas resultaron fallecidas y cuatro lesionadas.
En hechos posteriores, añade la secretaría, aparentemente relacionados con el primero (de los ataques), resultaron cinco personas fallecidas y ocho lesionadas.
Y al final promete: «Fuerzas de seguridad, elementos estatales y federales, en coordinación con la Mesa de Seguridad arriban para aumentar la presencia en el municipio y salvaguardar la seguridad de la población».
Esta guerra intestina por el control del Cartel de Sinaloa entre «Chapos» y «Mayos» se ha recrudecido desde 2019 en Sonora y ha tenido como principales campos de batalla Magdalena, Altar, Pitiquito, Caborca y San Luis Río Colorado.
Lo del sábado anterior según se observa en los videos compartidos participaron unas 20 camionetas, se utilizaron decenas de armas largas y centenares de cartuchos.
La Siguiente Pregunta es: ¿Cuándo terminará esta rivalidad que ha causado tantas muertes?
La respuesta está en el aire. Nos leemos el otro lunes.