Las protestas piden la renuncia de la presidenta Dina Boluarte, el cierre del Congreso, la convocatoria a elecciones generales para este año y a una asamblea constituyente.
La muerte de un hombre en la región sureña de Puno elevó este viernes a 60 los fallecidos en las manifestaciones antigubernamentales que comenzaron en Perú en diciembre pasado, informaron fuentes sanitarias.
La Dirección Regional de Salud (Direna) de Puno señaló en redes sociales que un hombre de 62 años falleció tras sufrir un shock hipovolémico mientras era conducido por una ambulancia hacia el hospital regional de Puno.
La víctima mortal fue identificada como Isidro Arcata Mamani y fue una de las personas heridas durante los violentos enfrentamientos que se presentaron entre manifestantes y las fuerzas de seguridad en la ciudad andina de Ilave (Puno).
Arcata figuró en una lista previa de 8 personas que fueron atendidas de emergencia en el Hospital de Ilave, a donde llegó con una fractura tercio proximal en fémur izquierdo y pronóstico reservado.
En el hospital también fue atendido otro hombre, de 46 años, por una herida por proyectil a nivel abdominal y pronóstico reservado, así como otras seis personas con fracturas, heridas y contusiones de diversa consideración.
Las movilizaciones en llave se desarrollaron durante todo el día y por la noche los agentes de la Policía Nacional solicitaron refuerzos ante el aparente intento de tomar la comisaría de la ciudad, ubicada en la provincia puneña de El Collao, según informaron medios locales.
La Diresa de Puno señaló, al respecto, que el personal del hospital de Ilave y otros 46 establecimientos sanitarios de la Red de Salud El Collao “se encuentran en alerta máxima para brindar la atención oportuna a la población”.
La información sobre la situación en Ilave se reportó poco después de que la ministra de Salud, Rosa Gutiérrez, informara que durante las protestas de este viernes se atendió a 25 pacientes en diferentes hospitales del país, 13 de ellos en Lima con policontusiones que, según dijo, ya recibieron el alta médica, al igual que otros 7 en Arequipa y 4 en Puno.