Vladímir Putin ha revelado este martes el desafío a Occidente, entre aplausos de los suyos, al asegurar que nada frenará su guerra hasta el final porque considera a Ucrania “territorio histórico de Rusia”. El mandatario, que cerró su primer discurso desde 2021 ante la Asamblea Federal, antes de la invasión, con la frase “la verdad está con nosotros”, anunció también la suspensión del último acuerdo para el control de las armas nucleares con Estados Unidos que ambos países mantienen en vigor. “Rusia superará paso a paso, cuidadosa y continuamente, los desafíos con los que se encuentre. No se puede vencer a Rusia en el campo de batalla”, manifestó Putin.
El secretario de Estado de EE UU, Antony Blinken, calificó de “muy decepcionante e irresponsable” el anuncio de Putin. “Pero, evidentemente, seguimos dispuestos en cualquier momento a hablar con Rusia de la limitación de armas estratégicas”, añadió ante los periodistas en la Embajada de EE UU en Atenas. Mientras, el secretario general de la OTAN, Jens Stoltenberg, ha instado a Putin a “reconsiderar” su decisión de suspender unilateralmente el tratado Nuevo Start, con lo que “se desmantela toda la arquitectura del control de armas”, informa Silvia Ayuso desde Bruselas. “Más armas nucleares y menos control de armas hacen del mundo un lugar más peligroso”.