Pablo Beltrán
El voto, el veto y el vato
Y por donde se hizo mucha alharaca en la semana que corre, lo fue por rumbos de palacio nacional, en donde el presidente AMLO, anunció el veto presidencial respecto a los recientes nombramientos de dos de los Comisionados del Instituto Nacional de Transparencia, Acceso a la Información, y Protección de Datos Personales (INAI).
Como muchos saben, estas dos vacantes estaban en una situación de designación urgente por parte del Senado de la República, de ahí que a inicios de marzo fueron ungidos mediante la votación por mayoría calificada, los ciudadanos Ana Yadira Alarcón Márquez y Rafael Luna Alviso, resultado que fue comunicado al ejecutivo para “los fines legales a que haya lugar”.
Y así fue que el mandatario, en ejercicio de su derecho constitucional de objetar tales designaciones, conforme al artículo 6, apartado A, fracción VIII, de la Carta Magna, llevó a cabo una especie de veto al considerar tal ejercicio legislativo como un verdadero “enjuague entre partidos políticos”, señalando específicamente a MORENA y al PAN, acusando que dejaron llegar al segundo peor evaluado – reprobado- de los concursantes y que con ello la derecha pudo meter a la dama en mención.
Bastante polémica la decisión del presidente, pues con tal actitud –que por cierto muchos la consideran acertada- le pega un verdadero revés al senador Ricardo Monreal, tanto en el manejo del poder legislativo, como en sus aspiraciones para el 2024.
Pues en calidad de mientras, el proceso legislativo tendrá que volverse a llevar a cabo, ya excluyendo a los dos nombrados, con la novedad de que la votación será ahora con solo la exigencia de las tres quintas partes de los senadores presentes.
Por si todo lo anterior fuera poco, no es un secreto que el organismo constitucional autónomo -garante del acceso a la información pública y protección de datos personales- no es muy bien visto por el titular del ejecutivo y ha sido criticado en múltiples ocasiones, sobre todo por haber impugnado el Padrón Nacional de Usuarios de Telefonía Móvil (PANAUT), lo que lo puso en “la mira” y ahora es satanizado como fruto del período neoliberal.
Como gran ventaja para el INAI es que goza de encaje constitucional y para su extinción se ocuparía de las dos terceras partes de los congresistas, aspecto con el que no se cuenta por parte del partido dominante, aunque bien pudiera surgir por ahí la idea de otro Plan B centrado en este tema, lo que a estas alturas no sorprendería a nadie.
Pero regresando al principio, vaya que bastante chusco resultó el nombramiento del reprobado, como parte de la llamada componenda manejada por Monreal; pero lo curioso es que Luna -el apadrinado por aquél-, no haya tenido empacho en aceptar la designación, pues solo le apostó al concertado voto, sin saber que vendría el muy evidente veto….¡a que vato!…
LEVÁNTATE LÁZARO. Y el que acaba de dejar su puesto de Coordinador de Asesores de la Presidencia de la República, es el cachorro de la revolución, Lázaro Cárdenas Batel, por cierto ex gobernador de Michoacán.
En el preámbulo de la celebración de otro aniversario de la expropiación petrolera, a celebrarse el día de hoy, se da la salida del hijo del ingeniero Cuauhtémoc Cárdenas Solórzano, aparentemente para dirigirse a un puesto a la CELAC, que no es otra cosa que la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños.
Con Lázaro, ya van llegando a la decena los que han salido de la primera línea del gabinete cautroteísta desde el inicio del sexenio, pues ahí están los casos de Simón Levy, Urzúa, Jiménez Espriú, Germán Martínez, Josefa González Blanco, Tonatiuh Guillén, Santiago Nieto, Julio Scherer y Tatiana Clouthier.
No se sabe si su salida y llegada a la CELAC haya sido con motivo de estrategias internacionalistas o de diferendos con el jefe del ejecutivo, pues en este último caso, ha sido práctica recurrente en la política mexicana el envío al “exilio político” cuando los personajes se mueven de más o ya resultan incómodos, pues no hay que olvidar que hace semanas el padre de Cárdenas Batel, o sea, el ex jefe de gobierno capitalino, hizo temblar la estructura política del morenismo, ya que al ingeniero se le vio participando con un grupo de notables pertenecientes al llamado “Colectivo por México” –opositores-, aunque a final de cuentas no fue al evento de arranque e hizo un deslinde después de haber sido señalado con dedo flamígero en el foro mañanero. Pronto se sabrá la “verdad verdadera”.
SIGUE LA NORMALIZACIÓN. No cabe duda que este mes de marzo está a punto de batir récord en ejecuciones, pues en solo pasadita la mitad del mes van más de cuarenta ultimados, lo que a pesar de ya no sorprender a muchos, no deja de llamar la atención el incremento en este tipo de ilícitos.
Aunque la autoridad municipal traiga otros datos, no pudiéramos ocultar el sol con un dedo y esto de la inseguridad para mala suerte, no solo enluta hogares y provoca grandes daños a las familias, sino que además en forma indirecta o colateral, proyecta a la ciudad como una especie de “wild wild west”, en donde los foráneos poco o nada van a pretender con hacer turismo o inversión, lo que pudiera en el corto o mediano plazo terminar por aislarnos del desarrollo normal de las ciudades con potencial, como la nuestra. Ya se sabe que no se ha podido encontrar la fórmula para erradicar este flagelo de la violencia, pero en calidad de urgente se tienen que seguir buscando alternativas, pues lo peor que puede pasar es que los ciudadanos se sigan acostumbrando a todo esto y que la autoridad ante ello, mejor se duerma en sus laureles.
DE BASQUETBOLEROS. Y por donde hubo ruido deportivo el día de ayer, lo fue por los rumbos de Hermosillo, en donde el ayuntamiento de esa ciudad, hizo un reconocimiento de la trayectoria de Sergio Maldonado, como un gran forjador de varias generaciones de campeones en el baloncesto, lo que dio lugar a que el gimnasio de la unidad deportiva Nacameri, tenga ahora el nombre de tan destacado entrenador y ex jugador. Por cierto que en Cajeme se están viendo lentos, pues en honor a la verdad, también tenemos a un personaje del nivel de Maldonado y por ello no sería mala la idea de nombrar algún espacio deportivo con el nombre de Jesús Heredia Luque, mismo que formó por lustros una casta de exitosos cajemenses en el básquet, los cuales por cierto, en muchas de las ocasiones no solo pasaron por encima de los capitalinos, sino que además llegaron a ser campeones nacionales.
Y dentro del mismo orden de ideas y bajo la premisa de que lo que no es parejo es chipotudo, la comunidad deportiva de Cajeme, sigue esperando que en el Salón de la Fama del Basquetbol en Sonora, se abran a criterios más justos y con ello se entronicen los nombres de ex jugadores de esta ciudad que hicieron historia, ya que al parecer se ha privilegiado casi pura gente de Hermosillo y Nogales, dejando a un lado a sureños como Juan Manuel “Gato” Soto, Rolando “Baby” Rivera, Enrique “Tribi” Sánchez, “Lulo” Benítez, Rafael Lira y por supuesto el ya mencionado “Chuy” Heredia Luque, entre otros. Ya veremos que sucede…