MOSCÚ. La tensión por el inicio de la Tercera Guerra Mundial sigue creciendo ante la avanzada militar ordenada por el presidente de Rusia, Vladimir Putin en Ucrania, situación que se extendería hacia otras dos naciones debido a que mostraron una posición neutral al estallido del conflicto armado que lleva más de un año en desarrollo dentro del territorio del presidente ucraniano Volodimir Zelenski, además de que expresaron su deseo de anexarse a un organismo que el Kremlin no reconoce.
El embajador ruso en Estocolmo, Viktor Tatarintsev, aseguró que tanto Finlandia como Suecia se convertirán en “objetivos legítimos” de “represalias” rusas, incluso “de naturaleza militar”, una vez que sean aceptados como nuevos miembros de la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN), quien en semanas anteriores indicó que los países miembros como Estados Unidos y Polonia, sobrevuelan el espacio aéreo europeo a manera de ensayo para un posible ataque a Rusia.
SUECIA RESPONDE A RUSIA
El gobierno de Suecia encabezado por el presidente Ulf Kristersson, anunció este miércoles que convocará al embajador ruso en Estocolmo, al día siguiente de que éste amenazara al país nórdico y a Finlandia. “El ministerio de Relaciones Exteriores convocará al embajador ruso para denunciar claramente este intento evidente de influencia”, afirmó el canciller sueco, Tobias Billström.
“Sólo Suecia decide su política de seguridad nacional, nadie más”, insistió el ministro en una declaración escrita enviada a la agencia AFP. En un texto publicado en el portal web de la misión rusa en Suecia, el diplomático arremetió contra la candidatura de Estocolmo a la OTAN, y juzgó que este país está dando “un paso hacia el abismo” al querer unirse a la Alianza Atlántica.
Suecia y Finlandia decidieron salir de su tradicional neutralidad y candidatear a la OTAN inquietas por la invasión rusa de Ucrania. Finlandia, fronteriza con Rusia, sólo espera para entrar en la OTAN la ratificación de Turquía prometida por su presidente, Recep Tayyip Erdogan.
Suecia en cambio se enfrenta de momento al veto de Turquía y a un retraso de la ratificación a su entrada por parte de Hungría. Estocolmo espera no obstante unirse a la alianza militar antes de la próxima cumbre de la OTAN, prevista en julio en Lituania.
El Kremlin aseguró este miércoles que la guerra híbrida entre Rusia y las potencias occidentales durará “mucho tiempo”. “Si hablamos de guerra en el sentido amplio, de confrontación con los países occidentales, de esta guerra híbrida… ésta durará mucho tiempo”, declaró a la prensa el portavoz del Kremlin, Dmitry Peskov.
Peskov afirmó que los rusos se han unido en torno al presidente Vladimir Putin de una forma “sin precedentes” y que la mayoría quiere ver alcanzados sus objetivos en Ucrania. “Vemos una consolidación absolutamente sin precedentes de la sociedad rusa en torno al presidente, en torno al comandante en jefe supremo y a la política que está llevando a cabo”, afirmó Peskov.