CIUDAD DE MÉXICO. La economía mexicana cuenta con las condiciones para conseguir un crecimiento de 2.5%, un pronóstico que puede ser incluso superior si continúa fortaleciéndose la Inversión Extranjera Directa (IED), proyectó el economista para México y Centroamérica en J.P. Morgan, Gabriel Lozano.
Si sigue fortaleciéndose el flujo de IED, la demanda agregada y la fortaleza del consumo doméstico.
Esta es la expectativa más alta de crecimiento que tiene algún participante del mercado. Según la encuesta de Banco de México, la media de las previsiones económicas para México promedia 1.68% para este año, mientras la recopilada por Citibanamex está en 1.9 por ciento.
Lozano argumentó que ahora la inversión privada está apuntalando de forma importante al crecimiento económico.
Venimos de años donde el consumo fue la punta de lanza de la resiliencia económica, pero no teníamos inversión privada. Al disiparse los temores sobre la relación comercial con Estados Unidos y una vez declarado el fin del complejo problema de la pandemia, vemos una importante entrada de inversiones de largo plazo en el sector manufacturero, principalmente en las regiones del norte del país, comentó.
La inversión productiva privada se está acelerando a niveles interesantes que no esperábamos, advirtió.