CIUDAD DE MÉXICO. El mercado laboral en México enfrenta una escasez de mano de obra de alrededor de un millón 600 mil plazas porque muchos mexicanos prefieren irse a Estados Unidos, otros emprendieron un negocio remoto y muchos más rechazan puestos porque tienen una ayuda económica del gobierno federal, sin tener que trabajar, señaló el presidente de la Confederación Patronal de la República Mexicana (Coparmex), José Medina Mora.
“Hay muchas familias que reciben distintos apoyos gubernamentales que juntándolos significan un monto importante y de ahí que muchos, sobre todo los jóvenes que reciben una beca mensual de 6 mil 310 pesos, opten por continuar estudiando, quedarse en casa o dedicarse a otras actividades no vinculadas a un trabajo”.
Medina Mora citó que la propia Cámara Nacional de Autotransporte de Carga (Canacar) mantiene una oferta de 50 mil vacantes ante la disminución de operadores ya experimentados que han optado por trabajar con empresas de EU.
En el caso de los jóvenes, éstos prefieren acogerse a los programas asistenciales del gobierno “y aquí lo preocupante es que muchos utilizan esos recursos para otros fines como la compra de alcohol, pues de los 2.5 millones adscritos a ese programa, solo 70 mil están dados de alta en una empresa para laborar o capacitarse, lo que resulta en una preocupante disponibilidad de mano de obra que puede aumentar de aprobarse la reducción de la jornada laboral de 48 a 40 horas”.
Sobre una virtual reducción de golpe la jornada laboral de 48 a 40 horas a la semana, Medina Mora consideró que representa una pérdida de competitividad de las empresas que les restaría presencia en las cadenas productivas entrelazadas con nuestros socios comerciales en el T-MEC y la oportunidad de continuar captando inversiones por relocalización o nearshoring que buscarán en otros países mejores condiciones.
“Antes que esa reforma, la prioridad en estos momentos debe ser recuperar con productividad el aumento de costos derivados de los incrementos al salario mínimo, ampliación de las vacaciones de seis a 12 días y más aportaciones al fondo de retiro para que los trabajadores puedan jubilarse con un ingreso cercano a su último salario.